“El presidente de la FIFA seguirá ejerciendo plenamente sus funciones en el seno de la FIFA y asumiendo sus responsabilidades. Y al mismo tiempo, seguirá cooperando con las autoridades de Suiza y de todo el mundo”, añadió el texto.
El fiscal federal extraordinario, Stefan Keller, abrió el pasado jueves un proceso penal contra Infantino al considerar que existen “elementos constitutivos de un comportamiento punible”.
En concreto, la justicia suiza investigará si Infantino cometió “abuso de autoridad”, “violación del secreto de función” y “obstaculización de la acción penal”, explicó la fiscalía suiza.
El origen del proceso es un encuentro de Infantino con el fiscal general Michael Lauber y con el primer fiscal de Haut-Valois, Rinaldo Arnold, contra el que también se ha abierto un proceso penal.
Lauber dimitió de su cargo el pasado 24 de julio después de meses en el disparadero por su gestión en los procesos relativos al FIFAgate, el vasto escándalo de corrupción que afectó a la máxima instancia futbolística en 2015.