“Quiero agradecer al presidente de la federación portuguesa. Me dijo que no era la primera opción, sino la única y eso me llena de orgullo. Pero me negué porque estoy bien aquí en el Roma”, dijo el técnico nada más finalizar el encuentro ante el Génova en la Copa de Italia (1-0, victoria del Roma).
Un partido que desbloqueó el argentino Paulo Dybala, flamante campeón del mundo, que saltó al césped desde el banquillo, con un gol en la segunda mitad.
“No quería sacarlo al inicio de la segunda parte, quizás podría meter a un jugador joven, pero quería hacer todo lo posible para no ir a la prórroga dado todos los compromisos que tenemos”, explicó el técnico setubalense.
Mourinho no dudó en defender al italiano Nicolo Zaniolo, que recibió los abucheos del público en el Estadio Olímpico.
“El Roma siempre da lo mejor de sí y yo aprendí de niño, aunque pronto cumpliré los 60, que cuando das lo mejor tienes la conciencia tranquila y no tienes que pedir más. Puedes jugar bien o mal, pero cuando un jugador da todo lo que tiene, por mí está bien”, dijo.
“Por eso digo que lo siento por los abucheos contra Zaniolo. Le pido una cosa a la afición: por favor, no abucheen a nuestros jugadores, ellos lo dan todo y más”, declaró.
Además respondió a las críticas del francés Vincent Candela, exjugador del Roma, sobre el mismo jugador en el Milan-Roma del pasado 8 de enero (2-2).
“Si uno cobra un sueldo del Roma no puede decir esas cosas. Sólo lamento que mi club no tenga la fuerza y la personalidad necesarias para ir de frente en estas cosas”, sentenció.