Domínguez completará en el 2019 el período por el que fue electo su antecesor, el también paraguayo Juan Ángel Napout, quien renunció en diciembre pasado tras quedar detenido en Suiza por el escándalo de corrupción que se desató en la Fifa en mayo y actualmente está en libertad condicional en Estados Unidos.
Los otros dos antecesores son el paraguayo Nicolás Leoz (87 años) que está bajo arresto domiciliario en Asunción y el uruguayo Eugenio Figueredo (83), preso en un penal de Montevideo.
El Congreso que sesiona en la sede de la Conmebol en las afueras de Asunción, eligió además al colombiano Ramón Jesurúm vicepresidente primero y al venezolano Laureano González como vicepresidente segundo de la Confederación Sudamericana de Futbol, conocida como Conmebol.
Como representantes ante la Fifa, con el cargo de vicepresidente y miembro del comité ejecutivo del organismo del futbol mundial, fueron electos Domínguez y Luis Segura de Argentina.
Antes de ser avalado por unanimidad, Domínguez admitió que la Conmebol “está en crisis y no va a salir de ella por una sola persona, tiene que ser un equipo, la transparencia tiene que ser de adentro para afuera”, enfatizó.
“(En la Conmebol) Deben terminar los intermediarios y negociar con los compradores finales. Las asociaciones y los clubes deben recibir más dinero”, añadió.
Poco antes de declinar oficialmente su postulación en favor de Domínguez, el uruguayo Wilmar Valdéz, hasta ahora titular interino del futbol regional, dijo durante el Congreso que la dirigencia regional decidió optar por el consenso “para devolver la credibilidad que se merece el balompié sudamericano”.