“Queremos ver a más mujeres jugar a fútbol y al mismo tiempo tener una familia”, explicó a varios periodistas Sarai Bareman, responsable de fútbol femenino en el seno de la FIFA, tras una reunión de la comisión.
La FIFA anunció este 19 de noviembre que propondrá en su consejo de diciembre una serie de medidas que se aplicarán inmediatamente en sus 211 federaciones, que por el momento ofrecen un marco desigual según las legislaciones y prácticas locales.
La instancia con sede en Zúrich no ha tenido conocimiento de “los serios problemas” hasta ahora, según su director jurídico Emilio García, pero quiere “anticiparlos” en el momento en el que el fútbol femenino acelera su profesionalización.
Los clubes que juegan a nivel internacional, por lo tanto bajo jurisdicción de la FIFA, deberán proponer una baja de maternidad de “al menos catorce semanas” remuneradas “al menos con los dos tercios de su salario contractual”.
The FIFA Football Stakeholders Committee has backed two sets of landmark reforms to strengthen the protection of female players, as well as football coaches. They will be put before the FIFA Council for final approval next month.
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— FIFA Women's World Cup (@FIFAWWC) November 19, 2020
Estará prohibido “cuestionar la validez de sus contratos por el hecho de que las jugadoras se queden embrazadas”. En caso de despido por este motivo, el club será sancionado económica y deportivamente.
Las jugadoras profesionales que continúan sus carreras después de un embarazo no suelen tener el mismo éxito, a la excepción de estrellas estadounidenses como Amy Rodríguez, Sydneym Leroux o la goleadora Alex Morgan, que busca participar en los Juegos de Tokio en 2021 tras dar a luz a una niña en mayo.