Niersbach, que aún mantiene su escaño en el consejo de la Fifa –y estuvo presente la semana pasada en el último consejo de la instancia en México– así como en el Comité Ejecutivo de la Uefa, podría declarar antes del juicio.
La Fifa abrió el 22 de marzo un proceso dirigido a Wolfgang Niersbach y a Franck Beckenbauer, este último en el centro de la investigación por su calidad de presidente del Comité de candidatura y después del Comité de organización del Mundial 2006.
La investigación abierta por la Cámara de Instrucción de la Comisión Ética de la Fifa también sospecha de Helmut Sandrock y Horst Schmidt, ambos antiguos secretarios generales de la DFB, y a Theo Zwanziger, expresidente de la DFB, y al exdirector financiero de la federación alemana Stefan Hans.
Beckenbauer y Zwanziger son sospechosos de corrupción, por haber recibido “pagos indebidos y contratos para sacar ventaja de la elección del país organizador de la Copa Mundial de la Fifa 2006”, precisó la Comisión Ética.
A Niersbach se le acusa no cumplir con “obligación de denunciar” una violación del código ético.
A principios de marzo, el bufete de abogados Freshfields, en un informe solicitado por la DFB, indicó que no había ninguna prueba de la compra de votos por parte de Alemania para organizar el Mundial-2006, pero que no se podía descartar dicho mecanismo de corrupción.