El Atlético se desperezó mediado el primer período, comenzó a llegar con peligro al área de Rulli, el partido cambió de líder y los madrileños pudieron encarrilar el choque en unos minutos de gran fútbol.
Saúl fue el primero en avisar con un gran remate al que Rulli respondió con la mejor intervención de la fría tarde de Anoeta e instantes más tarde, en el minuto 28, el francés Kevin Gameiro se plantó sólo ante el portero argentino y picó el balón, que se estrelló con el poste.
Vela, encendido
Eusebio, entrenador local, ya no lo veía tan claro porque la Real sufría, pero en uno de los pocos zarpazos que dio antes del descanso gozó de su mejor ocasión, a cargo de un Carlos Vela que obligó a Jan Oblak a volar al larguero para evitar el gol.
El mexicano sería el protagonista en la segunda parte cuando marcó el gol blanquiazul de penalti tras una pena máxima cometida por Gabi Hernández en una entrada al área de Yuri. Oblak cayó en el engaño del delantero maya desde los once metros.
Se encendieron las alarmas en el Atlético, el nerviosismo imperó y las acometidas rojblancas se volvieron muy previsibles, con Griezmann apagado y Saúl sustituido por Angel Correa para el tramo final del partido.
La Real evitaría apuros al lograr el segundo tanto para apagar los últimos focos de resistencia atlética con otro penalti, cometido sobre Vela, que en este caso materializó Willian José para redondear una gran tarde de fútbol de su equipo.
🎙 @Simeone, en sala de prensa: “Buscaremos seguir mejorando”
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