El comité ejecutivo de la UEFA enmendó el lunes en Praga el fair-play financiero (FPF) introduciendo una posibilidad de anticipación para los clubes, con una primera temporada menos dura.
El principio sigue siendo el mismo: los clubes europeos que quieran participar en las competiciones de la UEFA no pueden gastar más que los ingresos que generan, si no quieren ser sancionados, con restricciones en materia de fichajes o exclusión de las Copas de Europa.
Lo que es nuevo, es una posibilidad de anticipación para los clubes, bajo el nombre de voluntariado. Hasta ahora, los clubes caían bajo la lupa de los expertos financieros del FPF cuando ya estaban clasificados para la Liga de Campeones o la Europa League.
Desde ahora, un club que no está todavía clasificado a las competiciones europeas, si tiene un proyecto de desarrollo en este sentido, tendrá hasta el 31 de diciembre para declararse voluntario para un acuerdo de arreglo.
La ventaja es que las eventuales restricciones (como una limitación en los fichajes) no serán aplicables desde la primera temporada, al contrario que hasta ahora.
Entre otros cambios aprobados a las reglas figuran los siguientes:
- El gasto de los clubes en las divisiones juveniles y de mujeres no se tomará en cuenta para calcular las pérdidas.
- Los patrocinadores o cualquiera que aporte más de 30% de los ingresos de un club serán investigados para determinar si tienen vínculos con los propietarios.
- Los clubes no pueden ser juzgados con tanta severidad si juegan en países donde los ingresos por televisión y venta de boletos son significativamente menores que los observados en las ligas principales