Este proceso ante la justicia deportiva sigue una investigación abierta por la fiscalía de Turín relativa a la venta de entradas por parte de la Juventus a los grupos ultras, entre los que se habría infiltrado la N'Drangheta.
El abogado del presidente de la Juventus pidió calma y anunció a la prensa que presentarían un recurso.
Ningún responsable del club turinés ha sido condenado por la vía penal en este caso. Andrea Agnelli únicamente ha comparecido como testigo. En particular, reconoció reuniones con Rocco Dominello, un ultra cercano a la N'Drangheta, condenado a más de siete años de prisión por este caso.
La justicia deportiva señala a la Juventus por haber cedido a los grupos ultras lotes completos de entradas, cuando solo está autorizada a vender cuatro al mismo tiempo.