Tres favoritos
Primer peso pesado en comenzar la carrera, Michel Platini, antiguo favorito, se encuentra actualmente en una incómoda situación. Suspendido hasta el 5 de enero, el presidente de la Uefa mantiene su candidatura a la espera de la decisión final de la justicia deportiva.
El francés, miembro del Comité Ejecutivo de la Fifa desde 2002, estás suspendido 90 días desde el 8 de octubre por un pago recibido en 2011 de 1,8 millones de euros por parte de Blatter por un trabajo de consejero llevado a cabo nueve años antes.
La candidatura del triple Balón de Oro no será examinada por la Comisión Electoral antes de que se levante o expire su suspensión. Otro problema será que la Comisión Electoral que debe juzgar la integridad de los candidatos está formada por las mismas personas que le suspendieron.
El jeque Salman, miembro de la Familia Real de Baréin, es el último pretendiente declarado hasta la fecha. Presidente de la Confederación Asiática de Futbol (AFC) desde 2013, conoce bien la Fifa por ocupar uno de los puestos de vicepresidente.
De 49 años, había mostrado su apoyo a Platini. ¿Podría beneficiarse del apoyo de la Uefa en caso de impedimento de Platini? El bareiní tiene un gran pero: fue objeto de grandes críticas por parte de organizaciones de defensa de los derechos humanos por su papel en la represión del levantamiento democrático en 2011, que podría hacer descender el número de federaciones europeas que le apoyen.
El otro candidato importante es el sudafricano Tokyo Sexwale, antiguo compañero de celda de Nelson Mandela. Este hombre de negocios, con el aura de luchador contra el apartheid, no está tan relacionado con el futbol. Esto puede representar una ventaja, como una desventaja si contamos que son las 209 Federaciones de la Fifa las que eligen presidente.
Miembro del Comité de organización del Mundial-2010 de su parís, preside desde 2015 la Comisión de Supervisión de la Fifa para Israel y Palestina.
El camerunés Issa Hayatou, presidente interino de la Fifa y sobre todo jefe poderosos desde 1987 de la Confederación Africana (CAF) no vería con buenos ojos un rival de su mismo continente, según fuentes próximas a la instancia suprema del futbol.
Tres 'outsiders'
Sin peso político es difícil hacer gran cosa. El príncipe jordano Ali Hussein, único adversario de Blatter el 29 de mayo, puede presumir de haber llevado al suizo a una segunda ronda antes de retirarse. Pero en esa época, contaba con el apoyo de la Uefa, algo de lo que carecerá esta vez después de haber criticado a Platini, al que calificó como hombre del “sistema”.
Jérôme Champagne, que trabajó once años en la Fifa (de 1999 a 2010), puedo recoger los apoyos necesarios esta vez, contrariamente a la elección en mayo. El francés deberá intentar superar un gran déficit de notoriedad. Al igual que David Nakhid, excapitán de la selección nacional de Trinidad y Tobago, que pasó por el Grasshoppers suizo.
Antiguo diplomático, residente en Zúrich, Champagne (que no será apoyado por la Uefa ya que también criticó a Platini) estima que su larga experiencia en Fifa “no es un handicap”. “Para hacer reformas, necesitamos a alguien que conozca la institución desde dentro”.
Champagne como Nakhid son próximos a Blatter, que no ha abandonado la idea de influir en la identidad de su sucesor.
