Otros tres aficionados fueron también heridos de bala en la plaza Garibaldi, cercana a la estación central.
Además, tres aficionados más fueron ingresados en el hospital por heridas causadas por petardos o bengalas.
Las calles de Nápoles se inundaron de aficionados partenopeos celebrando la consecución del tercer ‘Scudetto’ de su historia, el primero sin Diego Armando Maradona y después de 33 años sin conseguirlo.
Con dos focos principales como los aledaños del estadio Diego Armando Maradona, en los que celebraron las casi 55 mil personas que acudieron a ver el partido ante el Udinese (1-1), y la céntrica Plaza del Plebiscito, Nápoles no tuvo ni una sola calle en la que no hubiera un aficionado celebrando el título italiano desde que terminara el encuentro.
Toda la ciudad estuvo en la calle con banderas, bufandas y camisetas. Una ciudad en la que el humo de las bengalas y el que dejan las motos también fue protagonista, nublando la vista en una larga noche.
Y es que esta noche poco les importó a los napolitanos que este viernes fuera un día laborable. Esta noche lo único que importaba era celebrar que se había hecho historia y que la ciudad volvió a ser campeona de Italia.
Los jóvenes de entre 15 y 30 años fueron el sector más presente en la jornada nocturna de festejos, acompañando siempre su presencia con cánticos de victoria; pero niños, padres y abuelos celebraron juntos en la ciudad sureña lo que parecía ser la fiesta de año nuevo.