“De esa edad a los 14 fue una baja visión leve la que tuve, pero en un intento de recuperarlo en un 90 por ciento con un trasplante de córnea, esta la rechazó y mi ceguera se hizo un 100 ahora soy B1 y estoy orgulloso de representar a Guatemala”, afirmó Molina.
El capitán de la Bicolor en el empate contra Costa Rica 1-1 vivió uno de los momentos más emotivos de su vida deportiva al anotar el gol que le dio la igualdad al combinado patrio. Este fue el segundo gol del defensor en tres años de carrera futbolística.
“Esto es una locura es una sensación indescriptible. Para mí es mi primer gol en un campeonato oficial, yo no soy de anotar mucho, es mi segundo gol en todo lo que llevo jugando”, explicó.
La diana tiene una dedicatoria especial. Molina alzó los brazos al cielo y dijo que el gol se lo dedicaba a su amigo Juan Pablo Espinoza que falleció hace dos años y que jugó junto al zaguero guatemalteco.
“Era buenísimo en la delantera. Usaba este número (2) por cariño a él, es que yo lo tengo ahora”, agregó.
Guatemala se enfrenta este jueves a las nueve de la maña contra Nicaragua en el Complejo Deportivo María de los Ángeles Soberanis de Rueda, en el Centro de Rehabilitación Integral (CRI) del Benemérito Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala