Para muchos el número 13 está ligado a la mala suerte, pero para Marco Pablo Pappa tiene un significado muy especial, ya que fue en el 2013 que conoció un amor incondicional que lo motiva día a día a ser mejor, el 2013 marcó su vida con el nacimiento de su primera y única hija María Paula.
A nivel simbólico el 13 está ligado a la muerte, pero no precisamente de manera negativa, sino en dejar algo en el pasado para iniciar un camino de evolución o de crecimiento personal, algo que va de la mano con lo que está viviendo Pappa.
Pedro Altán le ofreció que utilizará el número 10, pero Pappa se negó pues el algo que el joven volante se ha ganado con su trabajo, y por la amistad que le une con Gastón Puerari con quien compartió en el Chicago Fire de la MLS tampoco se atrevió a utilizar el 16.
Con el número 13 en la espalda Marco Pablo volverá a escribir una nueva historia con los rojos, así como la que vivió hace más de 10 años cuando debutó en la Liga Nacional, y espera que la experiencia adquirida a escala internacional sea de beneficio para el Club.
Este martes llegó al país el Certificado de Transferencia Internacional (CTI) que habilita a Marco Pablo a jugar con Municipal debido a que permitió su inscripción en la Liga Nacional.