Dos días habían transcurrido apenas de haber levantando su segunda copa de la Liga Nacional y el primer huracán azotaba con fuerza la casa de los venados.
Ese martes 31 de mayo el presidente del equipo, Amílcar Alvarado, confirmaba que tres de los cuatros extranjeros abandonarían la institución, junto con el entrenador guatemalteco Douglas Zamora.
El portero canadiense David Monsalve y los ofensivos argentinos Francisco Ladogana y Omar Zalazar, fundamentales para que los sureños se proclamaran campeones, le decían adiós a los sureños. El otro argentino, Mauricio Germi, sería el único que continuaría.
“Hace 48 horas atrás levantaba la copa feliz por el logro y hoy me bajan del barco en el cual fui partícipe en construir. Me voy triste, pero a la vez tranquilo que dejé todo por la camiseta; no me guardé nada”, dijo Ladogana en su cuenta de Facebook.
Trama entretenida
La película mazateca no terminaba ahí. Al día siguiente, el estratega Zamora sería reinstalado en el equipo, pese a que ya se había anunciado al mexicano Enrique Maximiliano Meza como su reemplazo.
La bomba de la incongruencia terminaría de explotar en el campamento mazateco con la no continuidad de su capitán y estandarte, Rodolfo Rafael González, y del desequilibrante Enrique Miranda.
Los dos futbolistas, fichados por Antigua GFC, también fueron pilares importantes para el título mazateco, al complementarse a la perfección con los canteranos.
“Mi salida del club no fue por dinero como muchas personas lo quieren hacer ver, ya que las condiciones económicas ofrecidas por mi nuevo equipo son las mismas que las de Suchi”, explicó González.
“Las razones fueron otras, que para mí tienen más valor que el dinero, como la muestra de interés por tu trabajo y el trato adecuado a las personas”, añadió el oriundo de Tiquisate.
Para suplir la baja de los que integraron la columna vertebral del campeón, la dirigencia venada contrató a los uruguayos Stéfano Perdomo y Julián Lalinde y a los nacionales Manuel Sosa, Yimi Villatoro y José Carlos López.
La reingeniería parece ser prematura e improvisada para Suchitepéquez que comienza la pretemporada esta semana. ¿Le alcanzará para revalidar la corona y destacar en la Liga de Campeones de la Concacaf?