“Quiero darle lo mejor a mi familia y no puedo”, se lamentó el capitán de la histórica bicolor mundialista Sub 20.
Para subsistir, hace dos semanas, su cónyuge, decidió vender su automóvil. “Se nos acabaron los ahorros y tuvimos que tomar duras decisiones”, señaló.
No ayudar a sus padres y a sus abuelos, como lo había hecho antes, también es motivo de frustración para el zaguero formado en Comunicaciones.
“El club ha estado mal organizado. Ha tenido gente que se ha robado el dinero. No hemos visto mejorías”, aseguró quien mantiene informada a la Asociación de Futbolistas Guatemaltecos (AFG) para rescindir su contrato con el Anzoátegui y demandarlos en el futuro.
El jugador de 24 años explicó que lo que le pasa a su equipo “no tiene nada que ver con la crisis política de Venezuela porque al club le entra plata. Siempre ha estado en la Copa Sudamericana o en la Libertadores”.
Pese al mal momento, Vásquez no pierde la fe y refiere que buscará por todos los medios continuar con su sueño de legionario porque “la Liga Nacional está en retroceso, debido a que los extranjeros que llegan al país no sirven”.