Fue hasta con Mictlán, en el 2011, cuando comenzaron a jugar tenis futbol en pareja, debido a una apuesta que hicieron con el argentino Fernando Peralta.
“Hicimos un campeonato interno en Mictlán. Q100 era el derecho que pagaba cada pareja para participar. Los ganadores se llevaban todo lo recaudado”, recuerda Estuardo Rivas, ariete de Aurora de la Primera División.
Ese momento marcó el destino de la dinámica pareja. En Cobán Imperial, en Zacapa y en Barillas, sus siguientes equipos, no tuvieron rival que los derrotaron.
Desarrollan destrezas
Además de la técnica, le inyectaron una dosis de estrategia al peculiar juego que no puede faltar en un entreno de futbol.
“Hay que tener técnica, buena comunicación, estrategia y resistencia física. Por ejemplo, en la final que le ganamos a Martín Machón y a Edwin Westphal el duelo tardó 30 minutos”, explicó el Puma Duarte, volante de Sayaxché de la Segunda División.
Los dos guatemaltecos, quienes se encuentran en Chile, conocerán este jueves a sus contrincantes. Martín Palermo, Roberto Pato Abbondanzieri, Matías Fernández, Álvaro Recoba, Sebastián Abreu, Marcelo Zalayeta, Justo Vilar, Roque Santa Cruz, Rolando Fonseca y Wálter Centeno podrían ser las luminarias a las que se midan.
