“Mientras todos compiten internacionalmente, nosotros solo lo hacemos localmente. Es una pena”, dijo en su momento el seleccionado Rafael Morales.
El segundo, la pasividad de los dirigentes, tanto de la Federación Nacional de Futbol (Fedefut) como de la Liga Nacional y de la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (CDAG) para encontrar oportunas y efectivas soluciones
“Entre las posibilidades que estudia la Liga está buscar la independencia de la Fedefut. Necesitamos hacer la consulta con la Concacaf y con la Fifa”, comentó William Rosales, gerente de la entidad.
La estrepitosa caída que sufrió la Bicolor en el ranquin de la Fifa en el 2017 —del puesto 78 pasó al 129— es el fiel reflejo de lo que ha dejado la inactividad.
En el escalafón de la Concacaf, países sin tradición futbolística, incluso, como San Cristóbal y Nieves, Nicaragua y Surinam, empiezan a superar a la Sele, que no juega oficialmente desde el 6 de septiembre de 2016.
La Copa Centroamericana de Futbol Playa, el Torneo Interclubes de Futsal y el Clasificatorio de la Liga de Naciones son las siguientes competiciones que podrían perderse los representativos nacionales si el castigo de la Fifa permanece. Incluso,
peligra el sueño mundialista de Qatar 2022.
La sanción solo puede ser revertida con la aprobación de los nuevos estatutos Fifa —en poder de la CDAG desde el 25 de julio del 2017—.
