Será un partido inédito, ya que nunca antes Guatemala se ha enfrentado contra los italianos. Pese a ello, los jugadores guatemaltecos reconocen el nivel de los azzurri e indican que se puede hacer un buen partido que les devuelva la vida.
Con ese afán doblaron la hoja del golpe anterior frente a los asiáticos y durante los dos últimos días se han enfocado en el crucial partido que abrirá la segunda fecha del grupo C.
OPTIMISMO
La alegría volvió a apoderarse de todos los jugadores de la Selección Nacional que le apuestan cuando menos a un empate, porque tienen claro que no hay mañana. Una nueva derrota los dejaría al borde del abismo.
Sonrisas y bromas es el común denominador que se percibe en los seleccionados mientras recorren los amplios pasillos del Hotel Intercontinental, un lugar cálido que los ha hecho sentir como en casa.
En ese ambiente también comparten con sus rivales italianos, vietnamitas y paraguayos. Se saludan entre sí en cada encuentro fortuito. Es algo que se ha vuelto cotidiano durante su estadía en Cali.
Ayer la Bicolor efectuó su último entrenamiento en el Coliseo Evangelista Mora con lo que dejaron lista la estrategia para buscar acertar un golpe al gigante europeo.
Recomponer el camino es la obligación que tiene el combinado guatemalteco y para ello deben hacer hoy un partido impecable.
Aunque la ilusión de avanzar a la siguiente ronda se dañó con la derrota frente a Vietnam, el coraje y la ambición se mantienen al máximo.