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El portero de Xelajú MC, José Mendoza entre alegría y nostalgia

El portero José Mendoza está en lo más alto de los guardametas menos vencidos, un éxito mediático que lo motiva y que le hace recordar su principal motivación: su familia, a quien le dedica el momento que vive.

José Mendoza —centro— le imprime confianza a Xelajú MC y ha disputado nueve partidos en el Apertura 2015. (Foto Prensa Libre: Carlos Ventura)

José Mendoza —centro— le imprime confianza a Xelajú MC y ha disputado nueve partidos en el Apertura 2015. (Foto Prensa Libre: Carlos Ventura)

El hondureño en estos momentos siente algo de tristeza porque su familia atraviesa inconvenientes como el fallecimiento de un tío y la enfermedad que padece su abuela; además, alegría por el cumpleaños 28 de su hermano mayor, Jerson Danilo Mendoza.

Pese a todos sus contratiempos, el portero lanudo se fortalece mentalmente y se erige como uno de los mejores y más seguros del torneo. En 10 jornadas disputadas, de las cuales ha participado en nueve, ha recibido cuatro goles y tiene un promedio de 0.44 goles por compromiso.

“Me siento bien porque estoy dando lo que tengo. En mi vida nunca había pasado una serie de problemas, entre ellos uno fuerte en los Tribunales, este me ha afectado mucho mentalmente, pero ahora que estoy concentrado en el juego, quiero seguir demostrando mi potencial. Tenemos que mantenernos arriba y eso se logra con trabajo y en equipo”, señaló el arquero.

Viejos recuerdos

El catracho rememoró lo que le afectó la situación legal que vivió hace unos meses por haber estado involucrado en el bautizo —maltrato contra menores de edad— de Mario Rodas. “En el torneo pasado no pude estar a la altura debido a que el proceso penal en tribunales me complicaba concentrarme”, explicó.


Pero las cosas son distintas ahora para José, el buen momento se lo da como regalo a su hermano, no solo por su cumpleaños sino también como una forma de agradecimiento por los consejos que le ha dado, además le envía un mensaje de motivación a sus familiares en Honduras, a quienes les pide fuerza para superar cualquier inconveniente.

“El triunfo ante Suchitepéquez está dedicado a mi hermano y a mi familia, les digo que no hay distancias, que yo estoy con ellos en los momentos de felicidad y angustia”, manifestó el catracho, quien dice estar agradecido con Dios y sus compañeros porque “sin ellos no sería nadie”.

Una de sus metas es seguir con el buen paso que tiene en estos momentos Xelajú, que suma siete triunfos, dos empates y dos derrotas en el torneo.

“La labor que estamos haciendo es buena, yo creo que este éxito es por la forma en que estamos trabajando, hay una hermandad, todos corren, meten, luchan. Si uno se lesiona el que lo sustituye lo hace bien, yo pienso que todo el equipo está conectado”, agregó.

El sueño del portero lanudo es jugar una final vestido con la casaca roja y blanca de los occidentales y cargar el cetro de monarca y menos vencido.

El próximo reto del portero será mañana contra Guastatoya.

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