Después de 10 años —1938—, un grupo de destacados aficionados altenses tomaron las riendas del club y decidieron cambiarle nombre.
Buscaban algo que identificara más a la cuidad y a los vecinos, por lo que bautizaron al plantel como Asociación Deportiva Independiente de Xelajú, pero tampoco los convenció, por lo que finalmente el 24 de febrero de 1942 pasó a ser Club Xelajú.
Después de la muerte del destacado futbolista quetzalteco Mario Camposeco en 1951 —jugaba de delantero—, los dirigentes decidieron agregarle las iniciales MC, como un homenaje a uno de sus máximos referentes.
Carlos Coyoy
Leyendas vivientes
Carlos Coyoy
Los futbolistas campeones con Xelajú MC Carlos Humberto Coyoy —1980—, Héctor Horacio Lacho González —1996— y el más reciente Julio Estacuy —2007 y 2012— recuerdan sus vivencias.
“Como quetzalteco me siento orgulloso de pertenecer a esta institución. Uno de los detalles que no se me olvidan es cuando nos coronamos en San Marcos —mayo del 2007—, porque remontamos un marcador que muchos pensaron que era imposible. Quienes hemos pasado por este club debemos sentirnos orgullosos por los 75 años del club”, refirió Estacuy.
González mantiene vivo el recuerdo de cuando ganaron el cetro en el estadio Cementos Progreso, en 1996.
“Tenía 22 años fue mi primer título. Ganamos en la ida —1-0— y en la final de vuelta nos empataron los cremas. Jugamos tiempos extras y Mariano Crisanto marcó el gol que nos dio la victoria. Xelajú ha sido para mí y mi familia un pilar fundamental. Lo hace diferente su afición”, refirió Lacho, quien hoy tiene de 44.
En tanto, Coyoy trajo a su mente el gol que le marcó a Cobán Imperial y que les dio el pase a la final en 1980.
“Ese partido fue de alegría y de duelo. Ganamos, pero también recuerdo que en el estadio murió un aficionado de Cobán, luego de la derrota de su equipo”, indicó Chaly Coyoy.