Vega viajó junto a su entrenador Rodman Murga y el juez internacional Mario Picón, desde la cancelación de las finales que debían disputarse el fin de semana pasado, iniciaron su travesía desde Qatar y estuvieron de escala en escala durante cuatro días.
Las disposiciones implementadas en todo el mundo para prevenir la propagación del coronavirus, complicó el retorno del equipo nacional especialmente con el cierre de fronteras, que obligó a tomar vías alternas para poder retornar a casa.
La misma inició el martes pasado desde Qatar, de donde viajó a Los Ángeles California, Estados Unidos; donde arribó alrededor de las 15 horas y tras varias gestiones de la Federación Nacional de Gimnasia en conjunto con el Comité Olímpico Guatemalteco (COG) se trasladó a México, vía Houston.
Después de estar en Estados Unidos hizo la siguiente parada en el Distrito Federal, de la ciudad de México, a la que llegó esa misma noche y al día siguiente salió rumbo a Tapachula, donde pernoctó y este día, vía terrestre ingresó al país. Por la noche estará llegando a su casa en Jocotenango, Sacatepéquez.
Boleto a Tokio, pendiente.
Con la cancelación de las finales de la Copa del Mundo en Azerbaiyán y la reprogramación de la última en Qatar, aún no está definida la participación de Vega en las justas de verano, las cuales también no se define si se celebrarán.
Falta por conocer cuál será el procedimiento para conocer cómo se determinarán las plazas de este deporte.
Por el momento, Vega mantiene la ilusión de poder participar en Tokio.