Lochte y tres de sus compañeros dijeron que fueron asaltados a mano armada mientras transitaban en un taxi el domingo por la madrugada cuando regresaban a la Villa Olímpica tras una fiesta, varias horas después de competir en sus últimos eventos.
Hasta ahora, la policía tiene poca evidencia para respaldar esa versión, e indicó que los nadadores no pudieron suministrar detalles importantes al ser entrevistados.
Un oficial de la policía con conocimiento de la investigación dijo a The Associated Press que la policía no puede encontrar al chofer del taxi ni a testigos.
El oficial habló bajo la condición de no ser identificado porque la pesquisa continúa.