La AIBA desafió a que cualquiera que sospeche de corrupción presente evidencias o enfrentará acciones legales, diciendo en un comunicado que se había llevado a cabo un “examen a fondo por la comisión pertinente”.
La Comisión de árbitros y jueces de la AIBA, que fiscaliza el trabajo de los oficiales, revisó los 239 episodios hasta la fecha en Rio “y determinó que menos de un puñado de esas decisiones no estaban en el nivel esperado”, según el comunicado.
“En consecuencia, se ha decidido, de acuerdo con el comité de evaluación de la AIBA, que los árbitros y jueces en cuestión ya no oficiarán en los Juegos Olímpicos de Rio 2016”, dice la nota.
Añadió el organismo que “de acuerdo con las reglas de la AIBA, los resultados de todos los combates se mantienen en pie”.
indica la AIBA.
La AIBA no dijo cuáles eran los combates cuestionados, pero al parecer el asunto explotó el lunes, cuando el ruso Evgeny Tishchenko ganó la medalla de oro al vencer al kazajo Vassiliy Levit.
La decisión fue ampliamente abucheada por el público.
Tras una decisión absurda que le perjudicó el martes, el campeón del mundo de los 56 kilos, el irlandés Michael Conlan, lanzó una furiosa diatriba contra los jueces y la AIBA. El vencedor fue de nuevo un púgil ruso.
“Respecto a la corrupción, nos gustaría reiterar firmemente que a menos que una prueba tangible se muestre, no rumores, se seguirá utilizando cualquier medio, incluyendo las acciones legales o disciplinarias, para proteger a nuestro deporte y su comunidad de jueces y árbitros, cuya integridad está constantemente puesta en tela de juicio”, amenazó la AIBA en el comunicado.
“La organización no se verá frenado por los juicios subjetivos de las partes descontentas“, añadió, y exhortó a los disconformes “a presentar pruebas con el fin de tomar las medidas apropiadas e inmediatas”.