Pero el camino para obtener la aprobación regulatoria podría complicarse, ya que sus detractores afirman que la combinación de ambas empresas reduciría la competencia en el mercado agrícola, incrementaría los precios para los granjeros y los consumidores y aumentaría el daño al medio ambiente.
Funcionarios de Monsanto y Bayer afirman que los agricultores y granjeros resultarían beneficiados, y que la empresa fusionada estará más adaptada para atender problemas como los del cambio climático.
Los resultados preliminares revelaron que el 99% de los votos fueron a favor de la fusión anunciada en septiembre, indicó Monsanto, con sede en St. Louis. Los accionistas recibirán US$128 por título en efectivo al momento de que se concrete la fusión, que aún requiere la aprobación de los reguladores. Monsanto indicó que espera que el acuerdo se cierre a finales del 2017.
Las acciones de Monsanto declinaron US$0.07 a US$104.52.
“Es un hito importante a medida que trabajamos para combinar nuestras dos compañías complementarias y cumplir con nuestra visión compartida del futuro para la agricultura”, comentó el presidente y director general de Monsanto, Hugh Grant, en un comunicado.
Bayer, el fabricante alemán de medicamentos y sustancias químicas para la agricultura, y Monsanto, que manufactura semillas, herbicidas y pesticidas así como otros productos agrícolas, han enfrentado la preocupación de algunos líderes gubernamentales y de la industria, quienes temen que la fusión perjudique a los granjeros al reducir la competencia en un momento en el que la economía agrícola se ha desacelerado.
El Sindicato Nacional de Granjeros (NFU, en inglés) dijo que el acuerdo significaría que tres compañías poseerían más del 80% del mercado de ventas de semillas de maíz en Estados Unidos y el 70% del mercado global de pesticidas.
Roger Johnson, presidente del organismo, dijo en un comunicado que la votación “subraya la preocupación del NFU de que estos acuerdos masivos se hacen para beneficiar a los accionistas de corporaciones transnacionales a expensas de las familias de los granjeros, los rancheros, los consumidores y las economías rurales” .
Tanto la NFU como el Consejo de Defensa de Recursos Naturales (NRDC, en inglés) exhortaron al Departamento de Justicia a rechazar la fusión. “Consolidar a Monsanto y Bayer incrementaría el uso de peligrosos pesticidas tóxicos y crearía un mal acuerdo para los granjeros, las abejas, los consumidores y el planeta en general”, dijo Rebecca Riley, abogada del NRDC, en un comunicado.
Altos funcionarios de ambas empresas afirman que la fusión será en beneficio de los granjeros y el medio ambiente. “Al unir nuestra pericia y recursos con el fin de impulsar esta visión compartida, podemos hacer aún más para beneficiar a los agricultores de todo el mundo y ayudar a enfrentar retos globales como el cambio climático y la escasez de alimentos”, aseguró Grant.