Aunque no hay una versión final, los lineamientos serían mantener el subsidio al diésel por el efecto que tiene en el transporte de pasajeros y mercancías, así como el de la tarifa social de energía eléctrica.
Alberto Pimentel Mata, ministro de Energía y Minas, afirmó que la propuesta está bajo análisis y se basa en la tendencia de los precios internacionales de los derivados del petróleo y la disponibilidad financiera para continuar con el apoyo actual a los consumidores o sustituirlo por otras opciones.
“Estamos discutiendo focalizar el subsidio para aquellos combustibles que se utilizan para el transporte de mercancías y de personas, que es donde más impacto puede generar en la economía porque afecta el bolsillo de los guatemaltecos”, declaró.
El ministro enfatizó que se trataría de una “reconfiguración” de las medidas y actualmente, un grupo de funcionarios de las carteras de Finanzas y Energía diseñan las propuestas para presentarlas a la Presidencia y luego al Legislativo, para su aprobación final antes del 4 de agosto, cuando concluya el subsidio de Q5 para el galón gasolina super y regular y Q7 para el diésel.
Lea también: El consumo de combustibles ha variado en los últimos meses ¿A qué se debe y cuál es la tendencia esperada?
Por otro lado, el 31 de agosto concluirá el apoyo temporal para el gas licuado de petróleo (GLP) para el que, durante el periodo de marzo a mayo, el Congreso autorizó una ampliación presupuestaria por unos Q2 mil 523 millones.
Saldo de bonos y ahorros
Al preguntar por el origen de los fondos para continuar con esta medida, aunque sea solo para el diésel y la energía, Álvaro González Ricci, ministro de Finanzas, expuso que se están identificando ahorros presupuestarios y ya hay unos Q200 millones en contención de gasto, que se destinaban a compras no prioritarias. Otra fuente de financiamiento serían los saldos de bonos del Tesoro.
“Estamos buscando la última alternativa para no tener que incurrir en nada que pueda vulnerar los indicadores presupuestarios”, enfatizó González Ricci, al reiterar que los subsidios estarían enfocados en el transporte de mercancías y pasajeros ya que, según los cálculos, el 80% de este combustible se utiliza en el transporte pesado.
Sobre la posibilidad de continuar con el programa de apoyo a los consumidores de gasolinas, el funcionario reiteró que la idea es apoyar el transporte de mercancías y transporte de pasajeros, hasta que se observe una tendencia mayor a la baja de ese hidrocarburo, pues “no se puede atender la generalidad”.
“Convendría mantenerlo”
Héctor Fajardo, directivo de la Coordinadora Nacional del Transporte (CNT), aseguró que si elimina el subsidio al diésel, cada galón subirá Q7 y eso, obviamente incrementará en esa proporción el costo del transporte, por lo que tendrían que ajustarse de tarifas para los clientes o pasajeros.
Lea además: La inflación en Centroamérica llegó a un promedio de 8.19% y todo indica que seguirá subiendo
“Es importante, si se quiere apoyar a la población, mantener el subsidio al diésel para el transporte y establecer controles efectivos para que el apoyo llegue al usuario final”, manifestó.
Sobre la tendencia internacional del barril de petróleo, aseguró que “hay un sube y baja” en el mercado y no hay certeza de si el precio vendrá con una baja de manera consistente, por lo que conviene mantener el subsidio de manera prudencial.
Ejecución
El Sistema de Contabilidad Integrada del Estado (Sicoin), registraba hasta ayer una ejecución de 65.81% del Apoyo Social Temporal a los Consumidores de Combustibles. O sea, Q1 mil 487 millones de un total de Q2 mil 260 millones.
Para el subsidio al gas propano, la ejecución es de 71.52% por Q238 millones, de un total de Q333 millones.
