El Banco Mundial (BM) informó en un comunicado de prensa que nueve países de Centroamérica y el Caribe han experimentado al menos un desastre natural con un impacto económico superior al 50% de su producto interno bruto (PIB) desde 1980.
El documento detalla que en el 2010 la tormenta tropical Agatha, en Guatemala, tuvo consecuencias devastadoras y provocó un aumento en la tasa de pobreza del 5.5%, mencionó además el impacto, en ese mismo año, del terremoto en Haití que fue estimado en 120% de su PIB.
El cambio climático también representa un desafío significativo para el desarrollo, con un promedio anual de pérdidas económicas por desastres relacionados con el clima de más del 1% del PIB en diez naciones caribeñas y cuatro centroamericanas.
“Establecido en 2007, CCRIF es el primer mecanismo en el mundo para agrupar los riesgos catastróficos para varios países, que ofrece a sus miembros aseguramiento soberano a tasas accesibles ante huracanes, terremotos y lluvias excesivas. En la actualidad 16 países del Caribe son miembros del CCRIF” explicó el BM.
Desde la fecha en mención esa instancia ha hecho doce pagos por un total de US$35.6 millones a gobiernos de ocho países miembro.
CCRIF fue desarrollado bajo la dirección técnica del Banco Mundial y con una donación del Gobierno de Japón.
Fue capitalizado por medio de contribuciones a un fondo fiduciario de múltiples donantes del Gobierno de Canadá, la Unión Europea, el Banco Mundial, los gobiernos del Reino Unido y Francia, el Banco de Desarrollo del Caribe y los gobiernos de Irlanda y las Bermudas.
También se financía con el pago por membresía de los gobiernos participantes.
El BM también detalla algunos beneficios: proveerá a los países bajos precios por el uso más eficiente de instrumentos de mercado de capital y de seguros, los nuevos miembros podrán aprovechar primas de bajo costo y los actuales miembros podrían obtener reducciones en primas debido al aumento del tamaño de la cartera de CCRIF, además esta alianza entre países del Caribe y de Centroamérica podría fortalecer la actividad económica a lo largo de la gran Cuenca del Caribe, se explicó.
“Luego de explorar opciones para contratar financiamiento soberano para el riesgo de desastres, los países centroamericanos concluyeron que adherirse al CCRIF SPC era el mecanismo de aseguramiento más eficiente y rentable para agrupar nuestro riesgo”, dijo Martín Portillo, Secretario Ejecutivo de COSEFIN.
Esto nos permitirá reducir la vulnerabilidad fiscal de nuestros países ante los efectos adversos asociados con terremotos, ciclones tropicales, lluvias en exceso y otros eventos”, agregó Portillo.
Durante la ceremonia, CCRIF SPC y el Gobierno de Nicaragua también firmaron un acuerdo de participación para que Nicaragua se convierta formalmente en el primer país del Istmo en sumarse al mecanismo de seguros. Se espera que otras naciones miembro de COSEFIN se unan a CCRIF SPC en el transcurso de este año y en 2016.
El Banco Mundial aportó el financiamiento inicial y servicios de asesoría técnica para la creación de CCRIF en 2007. En 2014 el Banco proveyó recursos para financiar el pago de ingreso de Honduras y Nicaragua al CCRIF, así como el pago anual de primas de seguros por cuatro años.