Economía

Comercio electrónico desde la óptica de la OMC

El perfeccionamiento de las nuevas tecnologías y su aplicación en el mundo de los negocios ha generado importantes cambios en la forma de actuar de las empresas.

En este contexto, es probable que el comercio electrónico se eleve pronto a la mesa de negociaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Sin embargo, para ello será necesario que todos los miembros de esta Organización lo acuerden por consenso.

El comercio electrónico ha sido definido en la OMC como “la producción, distribución, comercialización, venta o entrega de bienes y servicios por medios electrónicos”. Su discusión arrancó en 1998, durante la Segunda Conferencia Ministerial.

En dicha ocasión, los Ministros, reconocieron que la expansión del comercio electrónico a nivel mundial constituía una fuente importante de nuevas oportunidades para el comercio y con este fin, adoptaron la Declaración sobre el Comercio Electrónico Mundial.

Por medio de esta decisión, se acordó un programa de trabajo sobre el comercio electrónico, así como la práctica de no imponer derechos de aduanas a las transmisiones electrónicas, es decir el compromiso de los Miembros de establecer una “moratoria” respecto de los derechos de aduana. Desde entonces, ésta ha sido prorrogada en todas las Conferencias Ministeriales de la OMC. La más reciente de ellas fue adoptada durante la Conferencia Ministerial de Nairobi, en 2015.

En la OMC, la aplicación del Programa de Trabajo sobre Comercio Electrónico se lleva a cabo a través de cuatro órganos: el Consejo del Comercio de Servicios, el Consejo del Comercio de Mercancías, el Consejo de los ADPIC, y el Comité de Comercio y Desarrollo. El Consejo General desempeña la función central de supervisión y examina las cuestiones relacionadas con el comercio electrónico de forma transversal, así como el programa de trabajo. De igual forma, la evolución del programa de trabajo en esta materia se evalúa en cada Conferencias Ministeriales de la OMC.

Es importante resaltar que en el transcurso de 2016, las discusiones sobre comercio electrónico en la OMC se han intensificado. Un número creciente de Miembros ha expresado interés por ir más allá de los programas de trabajo establecidos en cada Conferencia Ministerial y establecer un mandato de negociación específico en la materia. Para ello, se necesitaría contar con el aval de todos los Miembros de la organización. Los proponentes de estas negociaciones, aducen que existe un importante vacío regulatorio sobre comercio electrónico a escala global y, dado el rol central que juega en la economía mundial, resulta prioritaria la creación de reglas destinadas a generar mayor certeza e inclusión de los diferentes actores del comercio internacional.

Con el fin de profundizar las discusiones sobre comercio electrónico, los Gobiernos de México, Indonesia, Corea del Sur, Turquía y Australia, organizaron la semana pasada en la OMC, un taller específico sobre el tema. En el evento se conversó sobre los retos y posibles soluciones para que un número mayor de consumidores y empresarios puedan aprovechar los beneficios y oportunidades del comercio electrónico a nivel mundial.

En el taller, participaron conferencistas de un gran número de instituciones, tales como el Foro económico Mundial, la UNCTAD, la propia OMC y representantes del mundo académico. Sobre los retos enfrentados por los países en desarrollo, se resaltaron los altos costos de infraestructura digital, las dificultades para cumplir con los requisitos fiscales y legales en los mercados extranjeros y la falta de un sistema sólido de pagos internacionales. Asimismo, se destacó la importancia de facilitar el acceso de las micro, pequeñas y medianas al comercio electrónico.

Por su parte, Roberto Azevêdo, Director General de la OMC, reiteró que la OMC puede jugar un papel importante en la reducción de estas barreras, por medio del desarrollo de reglas multilaterales que armonicen los procedimientos y reduzcan los costos de operación.

Dado el interés creciente que los Miembros han expresado recientemente por abordar el comercio electrónico en el marco de las negociaciones de la OMC, será de gran importancia seguir de cerca la evolución de los debates y evaluar los beneficios y oportunidades que puedan generar para nuestra economía.