Economía

Cómo ha sido el consumo de energía durante la cuarentena por el coronavirus en Guatemala

En marzo, mes en que se establecieron por el gobierno la restricciones y suspensión de labores empresariales, comerciales y escolares para contener la propagación del coronavirus se reflejó una caída en la demanda de energía a nivel nacional pero la demanda en los hogares subió, según datos de autoridades del sector.

El comportamiento de la demanda de energía cambió luego de las restricciones laborales en prevención por el coronavirus. (Foto, Prensa Libre: Hemeroteca PL).

El comportamiento de la demanda de energía cambió luego de las restricciones laborales en prevención por el coronavirus. (Foto, Prensa Libre: Hemeroteca PL).

La suspensión de labores en el país se implementó a partir del 17 de marzo del 2020 por el Organismo Ejecutivo. Desde esa fecha hasta fin de mes la caída en el consumo de energía eléctrica en el país fue de 7%, respecto al mismo período del 2019, según el presidente del Administrador del Mercado Mayorista (AMM), Edgar Navarro.

En otra comparación, en este caso mensual, se refirió que la primera quincena fue relativamente normal, pero a partir de mediados de mes empezó la disminución y ha sido en forma sensible, explicó el directivo, al mencionar que durante todo marzo la caída en la demanda de energía se registró en 3.10%, comparado con el año pasado.

Esa baja se fue influida principalmente por la suspensión de labores, con cierres totales o parciales en empresas, industrias, comercios y servicios. Sin embargo, el consumo residencial creció, ya que debido al confinamiento, la mayoría de la familia está todo el día en su hogar haciendo uso de equipos, electrodomésticos y equipo de entretención, y cientos de personas están haciendo teletrabajo o trabajo en casa que también demanda cierto consumo de energía, además que debido al toque de queda la familia que sale a trabajar regresa antes de lo acostumbrado a su hogar, agregaron las fuentes consultadas.

Navarro agregó que en las horas pico del día se ve reflejado que la industria no está trabajando a toda su capacidad. Aunque la iluminación a nivel domiciliar se mantiene alta en las horas picos y la demanda de energía ha crecido ya que toda la familia está en casa, esa demanda no se iguala a la energía que ha dejado de consumir el segmento industrial, servicios y comercio, explicó Navarro.

Demanda de energía en el país, comparación de marzo 2019 y 2020. (Foto, Prensa Libre: AMM).

La demanda de los usuarios finales como lo hogares aumentó, pero no en la misma proporción que los grandes usuarios, agregó Rodrigo Fernández, presidente de la Comisión Nacional de Energía Eléctrica (CNEE), al comentar que “han cambiado los hábitos de consumo derivado de que las personas se encuentran en sus casas durante la mayoría de las horas de día, a diferencia que cualquier día hábil normal, antes de las restricciones dispuestas”.

Comparado con febrero de este año, en marzo del 2020 la demanda bajó 2.47% en usuarios cubiertos por las distribuidoras, y con respecto a marzo del 2019 la disminución fue de 0.85%, añadió el presidente de CNEE.

Se debe tomar en cuenta que las distribuidoras no solo atienden demanda residencial, sino también de oficinas, negocios, servicios y comercios.

Según datos de la Empresa Eléctrica de Guatemala, S. A. (EEGSA) en el área de Guatemala, Escuintla y Sacatepéquez la demanda residencial creció 1.53% en marzo del 2020 respecto del consumo del mismo mes del 2019, que representa una diferencia de 2 millones 257 mil 459 kilovatios.

“Algunos de los clientes de EEGSA han realizado consultas sobre el aumento en sus facturas respecto a meses anteriores, por lo que la distribuidora ratifica que no se ha dado ningún incremento en la tarifa, la misma es ajustada trimestralmente por el ente regulador y fue fijada para el actual trimestre que comprende del 1 de febrero al 30 de abril del presente, en Q1.2 por kWh para la Tarifa Social y Q1.34 por kWh para la Tarifa No Social”, explicó Ivette Zambrano, vocera de la compañía.

La firma menciona un ejemplo. En el rango de consumo de 0 a 60 kWh está cubierto con un monto mayor subsidio, por lo que si un usuario consume 59 kWh su factura es de Q57.41. Pero el grupo que consume de 61 a 88 kWh (que tiene un menor subsidio), por lo que si un hogar ahora consumió 61 kWh su factura pasa a ser Q82.63, una diferencia de 44%.

Suspenden cortes de energía por falta de pago

El decreto 15-2020 aprobado por el Congreso donde se establece la prohibición para cortar los servicios básicos durante la emergencia sanitaria no ha sido sancionado ni publicado por el ejecutivo.

Tanto EEGSA como Energuate informaron que no están efectuando cortes o suspensión del servicio de energía en la actualidad.

Zambrano explicó que EEGSA no está realizando cortes desde el 16 de marzo, cuando se emitieron las medidas gubernamentales de emergencia para contener el coronavirus.

Aunque la lectura del contador o medidor y la emisión de la factura sigue siendo mensual, las personas que deseen un convenio de pago o pagos parciales pueden solicitarlo en la agencia Central de EEGSA zona 1, de 8 a 13 horas de lunes a viernes, por el chat del  del sitio electrónico www.eegsa.com o por correo electrónico atencion@eegsa.net, agregó.

Cada solicitud se evalúa y se brindan boletas de pago y se está trabajando para que el monto de las cuotas del convenio sea incluido en la factura, agregó.

Las distribuidoras de electricidad de Oriente y Occidente en apoyo de sus clientes, no ha realizado ningún corte al suministro eléctrico en sus áreas de operación, dijo Maynor Amézquita, vocero de Energuate, e indicó que se mantendrá la continuidad del servicio de energía.

Agregó que brigadas de Energuate han hecho las reparaciones en los circuitos afectados por condiciones climáticas y “se mantiene la atención en el 23852222, la aplicación móvil y distintas redes sociales para responder de manera efectiva a las ausencias de electricidad, por fallas ajenas a las distribuidoras”, agregó.

Consejos de ahorro

EEGSA emitió varios consejos para ahorrar energía si hace teletrabajo o estudio desde casa:

  • Aproveche la luz natural para trabajar.
  • Establezca horarios y optimice el tiempo de uso de su computadora.
  • Cierre las aplicaciones que no utilice para alargar la duración de la batería de la laptop.
  • Desconecte los cargadores de computadoras portátiles y celulares cuando no los esté utilizando para ahorrar consumo.

Para ahorrar energía en familia

  • Si se traslada de su habitación a la sala o a otra parte de la casa, asegúrese de apagar las luces de la habitación que ya no está usando.
  • Establezca horarios para ver televisión en familia.
  • Si utiliza aire acondicionado, úselo por horarios y abra ventanas para refrescar su casa.
  • Tome duchas cortas si utiliza calentador eléctrico.
  • después de lavar la ropa sáquela a secar al aire libre. Evite el uso de secadora de ropa eléctrica.
  • Dado que los niños permanecen todo el día en casa, organice una rutina de refacciones a media mañana y a media tarde para evitar que sus hijos abran constantemente el refrigerador, usen con mucha frecuencia el microondas o el horno tostador.
  • No introduzca alimentos o bebidas calientes a la refrigeradora, pues se consume más energía para enfriar.
  • Comparta con sus hijos juegos sencillos donde ganen puntos por apagar las luces y demás aparatos eléctricos que no se estén utilizando.
  • Fomente tiempos de lectura y juegos en familia que no impliquen el uso de energía eléctrica.
  • En esta época de aislamiento social y que permanece en su casa por la cuarentena, evite usar vestimenta que requiera ser planchada.

Comportamiento en los sectores

“Consideramos que la disminución de la demanda de energía está relacionada con la baja en el consumo de parte de industria, de comercio y servicios principalmente” expuso Navarro, al referirse al comportamiento nacional.

Opinó que el impacto principal se deriva de la falta de consumo en industrias, sector que están trabajando parcialmente, ya que en algunas fábricas se disminuyó el número de líneas de producción, excepto en la de productos de higiene personal y del hogar, jabón en gel, alcohol y otros, así como de algunos alimentos.

Alrededor del 30% del consumo eléctrico nacional lo efectúan los grandes usuarios (que conforman grandes industrias y empresas) y el 68% lo demandan los usuarios finales por medio de las distribuidoras explicó el presidente CNEE.

Aunque febrero pasado tuvo 29 días y marzo tiene 31, se observó que el consumo total de marzo 2020 para el segmento de grandes usuarios fue menor que febrero y que enero de este año. También es menor que marzo del 2019, dijo, coincidiendo con los datos mencionados por el AMM.

En promedio, el consumo diario de los grandes usuarios se redujo alrededor del 8% en marzo de este año respecto de febrero. La reducción también llegó a 8% comparando marzo de los dos años en ese mismo segmento, agregó la CNEE.

Hay actividades en donde se ha reflejado baja en la demanda por lo que han tenido que disminuir la producción como en helados, confitería y ciertos alimentos mencionó Enrique Lacs, director ejecutivo de la Cámara Guatemalteca de Alimentos y Bebidas (CGAB).

Javier Zepeda, director ejecutivo de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG) mencionó que el consumo había bajado alrededor del 10% en el sector industrial. Entre algunos sectores los de productos no esenciales ante la emergencia sanitaria pudieron haber bajado su producción al no tener alta demanda como la industria extractiva, la de metalúrgica. Otro que reportó menor producción es el sector de plásticos.

Otros son los de confitería y helados, agregó. “Hay que recordar que muchas heladerías están en centros comerciales los cuales están cerrados”, comentó Zepeda.

Alejandro Ceballos, presidente de la Comisión de Vestuario y Textiles (Vestex) que forma parte de Agexport, indicó que en la actividad textil la demanda de energía en el proceso de hilatura es alta, y representa el 70% del producto mientras que en confección significa el 10%. La caída en la demanda se debe a que las fábricas están operando, pero a menos de la mitad de su capacidad.

También disminuyó la oferta de servicios y de comercios con suspensión total de operaciones y otros en forma parcial, añadieron los entrevistados. Aunque coincidieron que creció la producción de enlatados, productos de higiene personal y para el hogar y otros ambientes.

A diferencia de los primeros días de aplicadas las medidas de emergencia, en la última semana de marzo e inicios de abril se vio más personas en la calle y más tráfico, pero no necesariamente desarrollando actividades laborales que demanden más energía sino algún trámite bancario u otro servicio, así como compras, mencionó Navarro.

También se hizo una comparación entre la demanda proyectada y la real. Para este año se previó una mayor demanda durante marzo. Si se compara la demanda proyectada sin tomar cuenta las medidas de emergencia por el covid 19, con la demanda real, la baja fue de 11.8% en el período del 17 al 31 de marzo, expuso el AMM.

 

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