Ese rubro pasó de Q15 mil 583.3 millones acumulado de enero a marzo del 2019, a Q15 mil 042.9 millones, una diferencia de Q540.4 millones.
Por actividad económica se muestran una reducción importante, principalmente en las actividades de Hoteles y Restaurantes con una reducción del 24.3%, agrega el informe de Fundesa, basado en Superintendencia de Administración Tributaria (SAT).
También cayó la recaudación en los sectores de transporte y comunicaciones con -14.7%,, los impuestos a empleados en relación de dependencia en -11.7%; el de suministro de servicios básicos (que incluye electricidad, gas y agua) -9.4% y servicios relacionados a actividades inmobiliarias y de alquiler -8.4%.
En los impuestos del sector industrial se reportan -8.4%, los de enseñanza -2.9%. y los de comercio por mayor y menos -0.7%.
Se debe tomar en cuenta que los datos incluyen el acumulado del primer trimestre, pero el 17 de marzo de este año se estableció la suspensión de labores en el país con el fin de evitar la propagación del coronavirus.
“Aunque muestran únicamente el primer trimestre del año, estos datos parecen confirmar el comportamiento respecto a los sectores económicos que se verán más afectados en las actuales circunstancias, pues las actividades de servicios, turismo, hoteles y transporte son las más afectadas, así como la actividad industrial”, se detalla en el informe.
Sin embargo, se explica que, aunque la construcción aún no muestra cifras negativas, según el estudio elaborado por la firma Inmosight3, para finales de año se espera una caída en ventas de vivienda de cerca de 55%.
Fundesa cita cifras estimadas por Central American Business Intelligence (Cabi). Refiere que las empresas reportan importantes mermas en sus niveles de ventas y la pérdida de facturación para las empresas durante el mes de marzo 2020 fue de un 20% y en abril de 40%. Esos datos representarían una pérdida en ventas por Q12 mil 800 millones en marzo y Q25 mil 600 millones en abril, estimando una pérdida de facturación para todo el año 2020 de unos Q50 mil millones, añade Fundesa en su informe.
Ese comportamiento no solo representará menos ingresos para el fisco sino para las empresas, negocios o personas que venden productos o prestan servicios, incluyendo negocios pequeños, se agrega.
¿Más deuda, más riesgos?
Fundesa recomienda a las autoridades evaluar, realizar un seguimiento y divulgar los riesgos fiscales porque no todas las medidas establecidas tanto por el gobierno central como por otras autoridades tendrán un efecto inmediato en los déficits y las deudas.
En cuanto al impacto que tendrían las tres ampliaciones presupuestarias impulsadas por el gobierno y aprobadas en el Congreso, en el nivel de endeudamiento público, la deuda pública total aumentaría 13%, al pasar de un saldo de Q152 mil millones a finales de enero 2020 a Q171 mil 807 millones hasta abril 2020.
“Esto representa que indicador de deuda pública cómo proporción del PIB estaría llegando a un 29%, comparado con el 25% que teníamos hasta enero 2020, aun relativamente lejos del valor crítico definido cómo limite por los estándares a nivel internacional que es de 40%”, se agrega en la publicación.
Pero advierte que también es necesario analizar el nivel de sostenibilidad de la deuda pública es importante evaluando los indicadores que muestran la capacidad de pago que tiene el país.
El indicador de deuda tanto como proporción del PIB y como medido sobre ingresos totales se ha deteriorado notablemente para Guatemala y el segundo indicador sobrepasa el valor crítico, según estándares internacionales que se usan para medirlo.
En cuanto al indicador de servicio de la deuda pública, este se estaría casi duplicando respecto al valor de 2019, afectando significativamente su capacidad de pago.
La deuda pública respecto de los ingresos totales fue en el 2019 de 229%, en enero del 2020 estaba en 222%, pero luego de las ampliaciones presupuestarias subió a 287%, mientras que el valor crítico está establecido en 250%.
En tanto en el pago de intereses respecto de los ingresos se duplicó y pasó de significar 4.5% al cierre del año 2019, a 8.6% a abril 2020 con las ampliaciones aprobadas.
También, dentro de otros de los impactos del covid 19 en el país está la posibilidad del desempleo. Según un estudio del BID como resultado de los esfuerzos de contención y el distanciamiento social, la actividad económica más afectada sería la de servicios, que incluye los sectores de comercio, turismo (hoteles y restaurantes) y transporte.