“Hoy tenemos el problema de la epidemia, pero creemos firmemente que la integración de la región centroamericana en un bloque económico en desaparecer las fronteras, unificar los controles aduaneros y tener la misma normativa en los temas impositivos -impuestos- y aranceles para poder generar una sola región que es muy importante que incluyendo a Panamá y Belice somos 50 millones de personas”, explicó el mandatario en un foro con la Asociación de Cámaras de Comercio Americanas de América Latina y el Caribe (AACCLA).
Giammattei declaró que con este número de personas se convierte en un tamaño similar a España y es un mercado “nada despreciable” con una ubicación estratégica con un Canal en la región y con acceso a los dos mares y “con una integración económica fuerte se puede superar la crisis”.
“Si nosotros logramos que la región se convierta en oportunidades, en inversión y principiamos a borrar las fronteras sería competitiva al igual que en otras”, precisó el mandatario al grupo de empresarios de AACCLA.
El presidente mencionó que el país y todo el mundo está pasando por una crisis y Estados Unidos tiene un potencial de compra muy alto para aprovechar en la región.
“Mi mensaje es para ustedes en los Estados Unidos para que nos ayuden y que las empresas norteamericanas se instalen aquí especialmente en el muro de prosperidad y principiar a generar cambios sustanciales en nuestros países”, manifestó el mandatario.
Hoja de ruta
En el foro con los miembros de AACCLA, Giammattei dio a conocer los diferentes proyectos económicos para activar la producción, y destacó la creación de una terminal de carga en Escuintla, el apoyo a las pequeñas y medianas empresas, sobre todo aquellas agrícolas que han sido impactadas por el coronavirus e incluirlas a la economía formal.
“A los agricultores de Patzún, Chimaltenango que han sido afectados por un cordón sanitario los vamos a formalizar para que sean proveedores del Estado”, destacó el gobernante y recordó los programas de apoyo financiero estatales diseñados para atender a las pymes en esta coyuntura.
Sobre la reapertura de la economía, Giammattei mencionó que será gradual y responsable considerando la experiencia que otros países han realizado para abrir una producció más segura.
“Hemos terminado los protocolos en todas y en cada una de las actividades que hay en las iglesias, en la liga de futbol, en los sectores industriales, comercio y cuáles son las normas y reglas que se deberá respetar”, enfatizó.
Reiteró que lo principal es desarrollar una economía que sea más dinámica, mejorar el clima de negocios, mejorar los costos de importación y exportación de bienes y servicios sobre todo en la infraestructura para la generación de empleo.
El mandatario también se refirió al paquete de leyes que están en el Congreso para impulsar la economía como las iniciativas de insolvencia, leasing, así como la creación de una zona especial económica entre Guatemala y México.
Juan Pablo Carrasco, presidente de la Cámara de Comercio Guatemalteco American (AmCham), indicó que observan que el eje económico mundial se estará alejando del continente asiático y se acercará a este hemisferio, representando una oportunidad para Guatemala por la ubicación geográfica con EE. UU.
“Tenemos que adecuar mejor nuestras leyes y fortalecer el estado de derecho para hacernos más atractivos a las inversiones y aprovechar estas circunstancias”, consideró el presidente de AmCham.
Apoyo
Neil Herrington, vicepresidente senior del Departamento de las Américas de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, expresó que han observado las medidas económicas que se han implementado para combatir la crisis sanitaria con los Q13 mil millones en los programas de apoyo económico, y las medidas restrictivas.
“Nos interesa conocer los planes del crecimiento económico a largo plazo y junto con AmCham buscamos ser el socio en este esfuerzo crítico”, apuntó Herrington.
Mencionó que los inversionistas guatemaltecos o estadounidense requieren certeza jurídica, la cual se mide con la transparencia, previsibilidad, rendición de cuentas y un debido proceso legal, factores que han estado ausentes en Guatemala en los últimos años, y remarcó a Giammattei el impulso que están brindando al fortalecimiento del estado de derecho y la institucionalidad en Guatemala.