De acuerdo con las estadísticas de la SAT, entre el 2005 y el 2008, la importación de celulares pasó de 1.78 millones a 4.3 millones.
En el 2009, la compra bajó 28.47 por ciento —3.08 millones de unidades—; es decir, 1.22 millones menos de teléfonos que durante el 2008.
Martín Chirotarrab, gerente General de Nokia para Centroamérica y el Caribe, confirmó que el 2009 fue “muy duro” para la industria en todo el mundo, ya que se redujeron los volúmenes de ventas en comparación con el año anterior.
No obstante, el empresario citó un estudio realizado por la firma consultora Pyramid Research que estimó que en el 2009 los ingresos totales de las compañías de telefonía en Guatemala fueron de más de US$1 mil 900 millones, de los cuales, el 62 por ciento correspondió a móviles.
Dispuestos a comprar
El crecimiento del mercado, en cuanto a las compras se refiere, va acompañado de cambios en la demanda de los usuarios, y de acuerdo con comerciantes, compañías de telefonía, analistas y fabricantes de celulares, los guatemaltecos cada vez más están dispuestos a pagar mayor precio por un aparato.
Un estudio internacional de la firma de análisis de mercado TNS Data resalta que, pese a que el 2009 fue un año marcado por “turbulencias económicas”, el 2010 se perfila como “de gran crecimiento para la industria de la telefonía móvil.
Según el documento, la descarga de música lidera la facturación.
Silvia Paniagua, directora regional de TNS Data, refirió que “la música para celulares ha sido un éxito rotundo en los mercados de México y Brasil, y existen señales claras de que también en Guatemala esto se convierta en un gran atractivo de ventas”.
El estudio TNS Global Telecoms reveló que en el caso de Guatemala, 71 de cada cien guatemaltecos están dispuestos a pagar por descargar música en sus aparatos, frente al 43 por ciento de los consumidores globales que no están dispuestos a hacerlo.
El análisis explica que el método más popular para la descarga de música es pagar un precio fijo —42 por ciento— por una cantidad de temas musicales, mientras que solo 25 de cada cien usuarios prefieren cancelar un precio fijo por un solo tema, en tanto que el 6 por ciento acepta pagar un cargo mensual por descargas ilimitadas.
Steve Vidal, gerente de Citi Movie, distribuidor de terminales, manifestó que el mercado ha crecido y, pese a que es mixto en su composición desde teléfonos de baja gama y de menor precio hasta los inteligentes, la tecnología ha abierto el potencial para que el segmento de jóvenes se desarrolle.
Vidal coincidió con Paniagua en que los usuarios están dispuestos a gastar más por un mejor aparato, y agregó que los consumidores ahora se han vuelto más exigentes con la calidad de los aparatos.
Si bien toman auge los teléfonos procedentes de China, debido a que poseen tecnología parecida a los smart phones o inteligentes, será cuestión de tiempo para que el respaldo y la calidad que tienen otras marcas sean los atractivos en la compra.
De todo un poco
Gabriela Valle, experta en terminales de Telefónica Móviles Guatemala, dijo que los consumidores piden celulares con radio, cámaras fotográficas de mejor resolución y acceso a Internet, entre otras cualidades.
Añadió que en el nivel corporativo, los teléfonos se ha convertido en los aliados de los empresarios para mantenerlos cerca de sus compañías y de sus bases de datos, ya sea en el caso de un vendedor rutero, que requiere información en tiempo real sobre inventarios, como de un ejecutivo que necesita estar al tanto de su escritorio aun cuando se encuentra de viaje.
Paniagua resaltó que de acuerdo con investigaciones de la firma que representa, en promedio, en Guatemala existen 2.38 celulares por persona.
“La tendencia actual es hacia la segmentación y, aunque en los últimos años el sector ha crecido entre 10 y 15 por ciento, según lo que hemos observado, se estabilizará entre 8 y 10 por ciento de aumento anual”, afirmó.
Marco Chávez, director de Cuentas Corporativas de Tigo, coincide en que la tendencia es hacia la tecnología y a la necesidad de convertir los teléfonos en centros de comunicación y entretenimiento, es decir, ya no emplearlos solo para llamadas, sino para navegar en Internet, enviar y recibir correos, e incluso mantener el álbum de fotos familiar o ver películas.
