La firma informó en un comunicado desde su sede, en el estado de Illinois, que las medidas buscan generar “flexibilidad financiera y mejorar el desempeño operativo a largo plazo”.
De las 150 tiendas que cerrarán, 108 son de la cadena Kmart y 32 más que llevan el nombre del consorcio. Estas tiendas arrojaron pérdidas de unos US$60 millones el año pasado.
Adicionalmente, la firma dio cuenta de que ha llegado a un acuerdo con la compañía Stanley Black & Decker para venderle la compañía Craftsman, rival de la anterior.
El comprador abonará por Craftsman US$525 millones cuando se cierre la operación y US$250 millones más a un plazo de tres años desde la fecha final de la transacción, así como porcentajes anuales sobre las ventas de Craftsman.
Adicionalmente, Sears generará US$1 mil millones de liquidez para sus cuentas mediante créditos y préstamos sobre sus propiedades inmobiliarias.
Todo ello para intentar salvar una empresa que, al igual que otras compañías de comercio minorista de Estados Unidos, atraviesa un fuerte descenso de sus ventas.
En los últimos cinco años Sears, una compañía fundada en 1886 y que llegó a dominar gran parte del comercio minorista de Estados Unidos, ha acumulado unas pérdidas de unos US$8 mil 200 millones.
Los títulos de Sears cerraron hoy con un avance del 0.29%.