Economía

“Cuando uno juega a nivel mundial, debe tener una visión global y ver los cambios”

El 26 de octubre último, la empresa acuícola Acuamaya, pionera en la producción, procesamiento y exportación de camarones, fue distinguida con el Galardón al Exportador 2022, que otorga la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport) desde hace 34 años.

Gabriel Biguria, fundador de Acuamaya, sostiene el la estatuilla que representa el premio Exportador del Año 2022. (Foto Prensa Libre: cortesía Agexport).

Gabriel Biguria, fundador de Acuamaya, sostiene el la estatuilla que representa el premio Exportador del Año 2022. (Foto Prensa Libre: cortesía Agexport).

Con motivo de la distinción de Acuamaya como Exportador del Año 2022, Prensa Libre conversó con Gabriel Biguria, fundador y gerente de la empresa, para conocer sus impresiones en torno al premio y su visión del mercado de las exportaciones en el contexto actual.

¿Cómo recibió la noticia de que Acuamaya fue reconocida con el galardón al Exportador del Año 2022?

Una sorpresa muy agradable. Estamos muy agradecidos con todos los colaboradores, todas las personas que hemos conocido en el mundo y con los que hemos trabajado conjuntamente para hacer de Guatemala un país exportador, cada vez más sofisticado, a base de esfuerzo y cumplimiento.

Después de haber ganado en la categoría de sostenibilidad empresarial, buenas prácticas y protocolos, ¿esperaban el galardón principal?

Realmente, para mí y para nuestro grupo, fue inesperado. Sabía que estábamos nominados por la base de solidaridad y otros aspectos de las comunidades, y el cumplimiento internacional a través de las certificaciones por las que hemos trabajado mucho y que forman parte del ser de la empresa desde cuando comenzamos hace casi 40 años.

¿Cuál fue la clave para que Acuamaya recibiera este reconocimiento?

Nuestro compromiso con la gente. Todos nuestros colaboradores son parte muy importante para nosotros, sus comunidades son vitales, el medioambiente es fundamental, igual que la tecnología más moderna.

¿Cuál ha sido el mayor salto en innovación que ustedes han implementado?

Cuando incorporamos programas de genética. Sabíamos que esa era la manera de dar un gran salto y, entre otras cosas, eso nos han diferenciado. Costó mucho, porque cada aspecto tiene sus riesgos, pero no hay de otra, porque si uno está en el ámbito internacional, debe tomarlo.

Acuamaya es una de las primeras empresas de acuicultura en Centroamérica y pionera en abrir mercados en Europa. ¿Cómo se mantiene a la vanguardia?

Le puedo decir que con nuestra filosofía y los principios básicos de empresa. Siempre hemos trabajado con un equipo de personas muy bien calificadas para competir en un mercado internacional. Han sido 40 años abriendo puertas para participar, porque eso no sucede de la noche a la mañana. Somos la primera empresa que exportó camarón a Francia en los 90, después nos extendimos a Asia y luego comenzamos con Estados Unidos, que fue más fácil.

Ha sido un proceso basado en el compromiso con nuestros valores, que es cumplir y tratar de acoplarnos a lo que el mundo exige hoy, en cuanto a estándares en aspectos de medio ambiente, calidad y relación con nuestros colaboradores.

¿Qué es lo que más satisfacción le proporciona?

El hecho de que un lugar muy pobre del país, donde no había casi nada, que es una zona de Jutiapa, ha cambiado. Ahí hemos estado (finca de cultivo de camarones en la aldea El Salitrillo, Pasaco, Jutiapa) y de no tener casi nada, se ha convertido en un polo de desarrollo.

¿Cuáles son los planes a futuro y cómo se preparan para enfrentar lo que viene?

Como es costumbre, siempre hay retos. El primero es hacer frente a los desafíos que existen en toda la región y los cambios que vienen por la situación económica mundial. Siempre tenemos la perspectiva de seguir creciendo, pero ahorita debemos ajustarnos a estos retos.

Las circunstancias económicas del mundo hoy son un reto grande, como lo fue la pandemia o como en los 90, lo fueron las enfermedades. Los mercados también se vuelven distintos. Hoy la guerra en Europa ha provocado fuertes cambios en las economías, pero también se nos abrió mercado hacia ciertos lugares de Asia. Entonces, cuando uno juega a nivel mundial, tiene que estar con la visión global y distinguir cada detalle que marcan los cambios.

¿Qué mensaje les daría a los nuevos empresarios que ingresan al mundo de la exportación?

Primero, tener una visión de a dónde se quiere llegar, pero también estar abiertos a los cambios. Hay que trabajar duro por esa visión y estar listos para la evolución que va surgiendo y, obviamente, tener el espíritu de que se deben resolver los retos, porque siempre hay uno nuevo.

ESCRITO POR: