El Congreso estadounidense no necesita ratificarlo. Foxx y Ruiz Esparza coincidieron en calificar al acuerdo de “trascendental” porque permitirá una mayor conectividad entre ambas naciones, la cual generará más turismo y comercio.
“Estados Unidos y México están en el umbral de una nueva era en nuestra relación aérea”, dijo Foxx durante la ceremonia.
“Negociamos un acuerdo moderno de transporte que elimina la interferencia gubernamental en las decisiones comerciales de aerolíneas, y expande las oportunidades para vuelos internacionales de pasajeros y carga entre Estados Unidos y México”.
Afluencia
Ruiz describió el convenio como “estratégico” para México ya que el número de pasajeros transportados entre las dos naciones representa un 70% del total de los vuelos internacionales de pasajeros originados en México, y un 52% del total de vuelos de carga.
Ambos países comenzaron a conversar en 2012 sobre la posibilidad de mejorar un acuerdo de transporte aéreo binacional suscrito en 1960 y modificado por última vez en 2005.
Robert Wirick, director de asuntos internacionales de American Airlines, dijo que “estamos muy emocionados y complacidos con este evento histórico”.
Enrique Beltranena, director ejecutivo de la aerolínea mexicana Volaris, indicó que en la actualidad solo dos aerolíneas mexicanas y dos estadounidenses pueden operan una ruta como la Houston-Ciudad de México.
“Esto queda eliminado y la ruta queda completamente abierta” con el acuerdo, señaló.