La medida fue adoptada después que el parlamento de Alemania aprobó el paquete de rescate removiendo un posible gran obstáculo para la entrega de los nuevos préstamos.
Una primera cuota de 26,000 millones de euros (29,000 millones de dólares) estará disponible para hacer frente a las deudas griegas y contribuir a la recapitalización de sus bancos.
Grecia debe cumplir un pago de su deuda el jueves al Banco Central Europeo.
Los parlamentos de Alemania y Holanda aprobaron por mayoría el miércoles el tercer paquete de rescate a Grecia, con lo que se evitó que incurra en mora en 24 horas.
El total de los recursos suministrados dependerá en parte del éxito de Grecia en poner en marcha nuevas reformas enfocadas a modernizar su economía, lo que seguramente significará más penurias para los griegos.
El dinero procedente de privatizaciones podría reducir el monto de los recursos necesarios. Pese a la petición del FMI de que se hagan quitas a la deuda griega, muchos países se oponen a esa medida y los países europeos no la analizarán antes de octubre.
La votación en Berlín también acabó con la especulación de que algunos legisladores conservadores del Partido Democristiano de la canciller federal Angela Merkel no apoyarían el rescate.
La propuesta de rescate obtuvo 453 votos a favor, 113 en contra y 18 abstenciones.
El desglose de los votos por partidos no estuvo disponible de inmediato, pero el resultado parece disipar el rumor generalizado de que aumentaba el número de disconformes en el bloque conservador de la mandataria.
Antes de la votación, el ministro de Finanzas, Wolfgang Schaeuble, instó a los diputados a respaldar el tercer paquete de ayuda a Atenas en cinco años a la vista del cambio de actitud del gobierno griego.
A título nacional, Alemania es el principal contribuyente en estos rescates. La propuesta contó con el respaldo de los socios de coalición de Merkel, los Socialdemócratas, y los Verdes de la oposición.
En Holanda se aprobó el rescate por mayoría después de un debate acalorado en el cual el primer ministro Mark Rutte recibió ataques por violar una promesa electoral al aceptar el paquete multimillonario.
El gobierno de coalición superó sin inconvenientes un voto de confianza al cabo del debate.
La aprobación alemana nunca estuvo en duda, pero en una votación similar el mes pasado, 60 miembros del bloque conservador de Merkel votaron en contra y parte de la prensa conjeturó que habría más rebeldes esta vez a medida que los alemanes se tornan más escépticos sobre la conveniencia de prestar más dinero a Grecia.
Schaeuble, miembro destacado del partido democristiano de Merkel que ha sido uno de los más enérgicos críticos de Grecia, pudo haber ayudado a la aprobación del rescate.
El ministro dijo a los legisladores que la aprobación del paquete de préstamos de tres años “es de interés para Grecia y para Europa” . Señaló que el gobierno griego ha dado pasos importantes en las últimas semanas para restablecer la confianza de los acreedores.
Schaeuble admitió que votar a favor del rescate no le resultó fácil, pero agregó que “sería irresponsable no aprovechar la oportunidad de un nuevo comienzo en Grecia” en vista de que el parlamento griego ya ha respaldado gran parte de las reformas exigidas por los acreedores.
En Holanda, los legisladores interrumpieron su receso veraniego para debatir el apoyo del gobierno al rescate griego. Geert Wilders, el legislador opuesto a la Unión Europea y al apoyo financiero para Grecia, abrió el debate calificando al primer ministro Mark Rutter como “el Pinocho de los Países Bajos” por quebrar una promesa electoral de no aprobar otro rescate.