ECONOMÍA

Siete pecados con el dinero que lo llevarán a un infierno financiero

El emprendimiento requiere de cuidar que todas las piezas de ese rompecabezas llamado negocio se unan coordinada y armoniosamente para lograr el objetivo soñado que es generar utilidades y que estas sean abundantes para el agrado de sus propietarios.

Algunas personas procuran planificar ordenadamente cada etapa del proceso antes de abrir las puertas de su negocio buscando minimizar los imprevistos y lograr que las cosas funcionen lo mejor posible.


Otras personas, en cambio, van tras el sueño y se lanzan sin pensarlo demasiado a la avensura de emprender con el único afán de luchar incansablemente hasta lograrlo.

Sin embargo, pensar que por mucho trabajar obtendrás resultados también es una falacia. Planificar a medias y avanzar remendando errores y atendiendo imprevistos todo el tiempo no es  la mejor manera de aprovechar los recursos, que casi siempre son limitados.

Independientemente de cuál sea su estilo al emprender, quiero hablarle acerca de lo que llamo los siete pecados con el dinero que pueden llevarle a un infierno financiero.

Y es que la base fundamental de todo negocio son sus finanzas. El flujo de efectivo o la falta de este es lo que puede matar o mantener viva a su empresa y esto es algo que siempre debemos tener presente a fin de evitar que nuestro sueño sea aniquilado.

1. Usar tarjeta de crédito indiscriminadamente

Su tarjeta de crédito puede ser una gran herramienta de apoyo para la operación de su negocio. De hecho, utilizarla para hacer algunas inversiones iniciales puede ser una buena idea siempre que se haga con moderación y planificadamente.

Pero no debe olvidar lo importante de utilizarla como medio de pago o bien para financiarse por períodos muy cortos. El no hacerlo de esta manera podría provocar gastos por servicio, intereses y recargos que terminarán acabando con sus ganancias.

2. No pagar a tiempo sus créditos

Si utiliza apalancamiento por medio de créditos debe procurar que sus abonos sean realizados disciplinadamente en las fechas que corresponden.

El no hacerlo puede generar moras, intereses y, en casos extremos, demandas que pueden dañar su referencia de crédito para futuras operaciones.

3. No respetar su presupuesto mensual de gastos

Una empresa ordenada rige sus gastos por medio de un presupuesto. Esto permite realizar proyecciones y evitar gastos discrecionales y desordenados.

Pero tener un presupuesto por sí solo no es suficiente. Es necesario apegarse a lo presupuestado. No respetar ese plan de gastos en su negocio que limite y ordene responsablemente el uso del dinero en la empresa puede llevar al desorden financiero y puede tener consecuencias serias.

Para evitar realizar gastos aleatoriamente se puede contemplar dentro de la planificación uno o varios rubros para gastos de emergencia o gastos varios que también sea limitado.

4. Gastar el dinero que no tiene

El hecho de tener cuentas por cobrar no significa que el efectivo ya esté en su cuenta.
Tener clientes potenciales o negocios en proceso no representa ganancias hasta que se materialicen.

Así que gastar el dinero que será su ingreso antes de tiempo solamente desajustará su presupuesto mensual de gastos con los consecuentes efectos negativos.

Pensar que terminará bien el año y comprarse un auto nuevo o anticipar las vacaciones es la forma más rápida de arder en las llamas de los problemas financieros.

5. No pagar sus impuestos en orden

El tema de los impuestos siempre ha sido polémico para los emprendedores por muchas razones. Que si es justo, que si no lo es, que si el gobierno no produce, que si los invierten mal, etc.

Una cosa es segura. Aunque a nadie le gusta pagar impuestos, todos estamos obligados a cumplir con esta responsabilidad.

Con todo, el no pagar sus impuestos a tiempo y cabalmente tarde o temprano te puede representar multas, recargos y hasta penas graves que pueden implicar el cierre temporal o permanente de su empresa. Por ello si no quieres dolor y sufrimiento, no omitas esta importante obligación ciudadana.

6. Conceder créditos indiscriminadamente

Vender al crédito puede ser positivo. Puede abrir muchas oportunidades de vender más o de conseguir más clientes. Pero dar créditos indiscriminadamente puede ser solo una ilusión que te haga pensar que estás haciendo las cosas bien.

Para ofrecer créditos debe tener liquidez así como una buena estrategia de cobros que le permita recuperar su dinero y mantener la solidez financiera de su empresa.

7. Mezclar las finanzas personales con las del negocio

Así como el agua y el aceite no se mezclan. El dinero funciona bien cuando está en el lugar indicado. El desorden siempre es fatal.

Y en esa línea, mezclar el dinero de su bolsillo con el que está operando la empresa puede llevar al caos especialmente si estas asociado con alguien más.

En lugar de tomar pequeñas porciones de dinero a cuenta de gastos personales, es conveniente designarse un salario y apegarse a recibirlo mes a mes. Esto dará orden a su bolsillo y al de su empresa. Y cada fin de año reparte los excedentes ganados como utilidades.

Absolución y arrepentimiento

Así pues, si has cometido alguno de estos siete pecados, aún estás a tiempo de arrepentirte y buscar redención.

Lo primero es tener conciencia clara de que se ha “pecado” para luego restituir haciendo las cosas de mejor manera. Te aseguro que puedes encontrar la puerta del cielo si tan solo tienes siempre presente la importancia de llevar controles ordenadamente con disciplina y educación financieramente constante.

Autor: Edwin Amaya @edwinamaya_
Bloguero, conferencista, editor de www.1000IdeasdeNegocios.com y experto en estrategia digital. Pero sobre todo #Guatelover.

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