A la fecha existen dos mil 582 criptomonedas, según el sitio Coinranking.com. Al viernes pasado el tamaño de la inversión en monedas virtuales a escala mundial era de US$535 mil 527 millones, explicó Juan Carlos Rodríguez, gerente de Homeland, una empresa de tecnología.
Se trata de dinero en espacios virtuales fuera del control de gobiernos y bancos centrales, creado por casas emisoras en plataformas informáticas mediante algoritmos. Ante la falta de controles, algunos desconfían por estafas o posible uso irregular.
Por ejemplo, el Bitcóin fue creado en el 2009 y ahora experimenta un repunte. Empezó en US$20 y a noviembre del 2017 estaba alrededor de US$10 mil, pero el fin de semana ya se reportaba en US$19 mil 301. Esto coincidió con su estreno en el mercado de futuros de la Bolsa de Chicago.
Tanto Rodríguez como Jonny Vallejos, director y fundador de Guatecoin, refieren que al no tener regulación, su uso es más libre, pero que en el país aún se desconfía de este tipo de monedas.
Aunque las plataformas de los emisores indican que son confiables y existe el mecanismo de registro informático —como una contabilidad— compartido entre los inversores, refieren también que conlleva sus riesgos y recomiendan al usuario informarse para evitar posibles estafas con páginas electrónicas.
El presidente en funciones del Banco de Guatemala, Sergio Recinos, recomendó investigar cuidadosamente la decisión de invertir en criptomonedas.
“Que no lo vean como una inversión a corto plazo y que no se vayan de boca con la coyuntura del aumento en la cotización, en los últimos meses”, dijo Rodríguez, quien agregó que en Guatemala lo que han detectado son oficinas de asesoría o de cambio de divisas con criptomonedas que cobran comisión, pero no para inversión directa.
Si la inversión o compra se hace directa, no hay cargos bancarios o de plataforma asociados a pagos.
Sin embargo, Recinos indicó que aunque criptomonedas como el bitcóin han venido evidenciando aumentos en su precio desde 2014, llegando a niveles récord recientemente, su uso es aún muy bajo incluso en economías desarrolladas —particularmente Estados Unidos de América e Inglaterra—.
En ese sentido, las monedas virtuales no son reconocidas como una moneda en Guatemala y, por tanto, no constituyen un medio de pago de curso legal. Tampoco se consideran como divisas, señaló el funcionario.
¿Se acepta como pago?
Prensa Libre hizo una búsqueda de firmas o personas prestadoras de servicios para inversión en criptomonedas o establecimientos que las acepten como pago.
Se encontró que desde el 2013 se pueden efectuar donaciones con bitcoines a la Universidad Francisco Marroquín, según se explica en su página de internet, en la cual tienen el enlace para hacer el pago por esa modalidad.
Existen servicios que hacen la función de agencias o casas de cambio de divisas y otras que brindan servicios de asesoría para compra o venta de las criptomonedas.
Los hoteles Villas Vacacionales y Villas Los Cabos, en Monterrico; Riviera de Atitlán, en Atitlán, y Villa Orotava, en Antigua Guatemala, reciben pago en criptomonedas, dijo vía telefónica René Marroquín, CEO de esa firma.
Agregó que en el sector hotelero tienen muchos años de operar y que desde hace cuatro años, con un equipo de expertos estadounidenses, prestan servicios para inversión y pagos con bitcoines. Sus oficinas se encuentran en el piso 18 del edificio Géminis 10, zona 10 capitalina.
Aparte, la firma Guatecoin, creada en el 2015, se presenta como una “empresa de internet en Guatemala”, dedicada a la explotación del mercado de las criptomonedas. Refiere que se enfoca en comercializar —compraventa— las principales criptomonedas del CoinMarketCap, y proveer servicios de “minería” —búsqueda de bitcóin con equipo especializado— basado en la nube, y tienen alianza con proveedores de equipo, explicó Vallejos.
En su sitio electrónico les aparecen seis agencias en diferentes centros comerciales, pero Vallejos dijo que las cerraron debido a que la demanda era muy baja y no compensaba los costos. Entre las principales que se comercializan mencionan bitcóin, ethereum, ripple, litecoin, dash, monero.
También aparece Lynx Guatemala. Aunque no se logró contacto con la empresa se refiere en su sitio de internet que tiene oficinas en la zona 16.
En esa misma página electrónica se ofrecen servicios para sistemas de cobro con criptomonedas en establecimientos comerciales, además de recepción de remesas. En todos los casos, la transacción se hace con un banco local.
Otra es Bitcoins Guatemala que se identifica como una casa de cambio de criptomonedas. Estuardo Rodas, encargado de ventas, refiere que el interesado puede comprar bitcoines por medio de la página de internet o en persona. Y para venderlos el trámite es únicamente en persona.
La cantidad varía entre US$1 y US$4 mil diarios, dependiendo de qué modalidad se use, pero en ambos casos, el pago se hace por medio de un banco local. Si es en persona, ambos acuden a una agencia bancaria en la ciudad capital.
Los entrevistados refieren que se puede hacer compras por medio de los mercados o las plataformas de intercambio. Agregan que en el mundo las más reconocidas son Etoro, Coinbase —referente de mercado en EE. UU.—, IQ Option, Bittrex, o Bitstamp. Esta última acepta tarjetas de crédito de Guatemala; además está en el mercado de bitcóin europeo, pero a la vez es la primera casa de cambio de Europa. También hay casas de cambio oficiales de cada mercado.
Al final, Rodríguez y Vallejos refieren que puede haber un buen futuro para las criptomonedas en Guatemala, ya que con la tecnología y la globalización se puede extender su uso. El primero refiere que el sistema bancario guatemalteco es muy sólido y los entes bancarios pueden aprender a usar las criptomonedas.
En cuanto a su uso en otros países, en Centroamérica, Panamá ya posee cajeros para cambio de monedas virtuales y en Costa Rica la semana pasada se inauguró la primera tienda de ropa, UV.Line, que acepta Bitcóin.