“Estamos buscando una nueva marca o nombre para nuestro navegador en Windows 10” , indicó el jefe de marketing de Microsoft, Chris Capossela, en el encuentro para empresas que la compañía realiza esta semana en Atlanta (Georgia) .
El nuevo navegador será el que aparecerá en Windows 10 por defecto, aunque Internet Explorer no desaparecerá del todo y todavía se mantendrá en algunas versiones para garantizar compatibilidades con productos anteriores.
Microsoft lleva años lidiando con los problemas de imagen de Internet Explorer, percibido por muchos usuarios como problemático y anticuado frente a la irrupción y consolidación de alternativas como Firefox, el Chrome de Google o el Safari de Apple, que poco a poco le han ido quitando cuota de mercado, especialmente en los teléfonos inteligentes.
Según datos de la web especializada W3Counter, en febrero de 2008 Internet Explorer era el navegador usado por un 63 % de los internautas a nivel mundial, mientras que siete años después, en febrero de 2015, apenas un 17 % de quienes se conectaron a internet lo hicieron con Explorer.
El pasado mes de diciembre, el jefe de Internet Explorer y quien había estado al frente del navegador de Microsoft durante diez años, Dean Hachamovitch, abandonó la compañía.