“Estoy agradecido al comité” Nobel, reaccionó Bengt Holmström, miembro extranjero de la Academia real de ciencias de Suecia, que entrega el premio Nobel de Economía.
El tema de estudio de los premiados es quizá menos prestigioso que las grandes cuestiones de crecimiento, desempleo o pobreza, por lo que no figuraban en los pronósticos. Pero ambos tuvieron el mérito de dar nacimiento “a un fértil terreno de investigación fundamental”, precisó el jurado: Holmström desde finales de los años setenta, y Hart en la década siguiente.
“Gracias a la investigación de Oiver Hart y Bengt Holmström, tenemos ahora los instrumentos para analizar no solamente los términos financieros de los contratos, sino también la prestación contractual de los derechos de control, de los derechos de propiedad y de los derechos de decisión entre las partes”, explicó la Academia real de ciencias.
Entre los temas a los que han aportado luz, según la Academia, plantean estos interrogantes: “los suministradores de servicios públicos como escuelas, hospitales o prisiones ¿deben pertenecer al (sector) público o privado?”
“Los profesores, el personal de sanidad, los guardias de las cárceles ¿deben recibir un salario fijo o indexado a sus resultados?” “¿En qué medida los directivos de empresas deben ser remunerados a través de primas o de 'stock-options'?”.
Oliver Hart
Hart nació en 1948 en Londres y tiene la nacionalidad estadounidense, país al que ha estado vinculado académicamente desde la década de los años ochenta.
En la actualidad es profesor de Economía de la cátedra Andrew E. Furer en la Universidad de Harvard, institución en la que enseña desde 1993.
Se graduó en Matemáticas en la Universidad de Cambridge, pero pronto se pasó a la Economía y en esa rama se doctoró en la Universidad de Princeton (EEUU), donde conoció a su futura mujer y madre de sus dos hijos.
Regresó a Reino Unido para enseñar en las universidades de Essex y Cambridge, antes de pasar por la Universidad de Pensilvania, la London School of Economics y el Massachusetts Institute of Technology (MIT).
Su trabajo, según explica la Universidad de Harvard, se centra en la teoría de los contratos, la teoría de la empresa, las finanzas corporativas y el derecho y la economía.
El eje de sus investigaciones es el papel que desempeñan las estructuras de propiedad y los acuerdos contractuales en el gobierno de las empresas, y sus investigaciones teóricas le han llevado a ser experto del gobierno estadounidense en dos procesos legales.
Hart es miembro de prestigiosas instituciones como la Academia Americana de las Artes y la Ciencias o la Academia Británica.
Según explicó a la Academia Sueca, hoy se despertó de madrugada y pensó que ya era tarde para que le dieran el premio este año, pero entonces “afortunadamente, sonó el teléfono”.
Lo primero que hizo, confesó, fue abrazar a su mujer, despertar a su hijo pequeño y llamar al colega con el que ha compartido el Nobel, Bengt Holmström, al que le une una larga amistad.
Bengt Holmström
El finlandés, en una entrevista difundida también por la Academia Sueca, consideró muy especial que el premio fuese compartido: “Oliver Hart; estoy tan contento de haber ganado con él, es mi mejor amigo aquí”.
Nacido en 1949 en Helsinki (Finlandia), Holmström es actualmente profesor de Economía y Empresa en el MIT, cuyo departamento de Economía dirigió entre 2003 y 2006.
En la universidad de su ciudad natal estudió matemáticas, físicas, física teórica y estadística y obtuvo su doctorado en la Universidad de Stanford (EEUU) en 1978.
Tras dos años de trabajo en el sector privado, en el grupo finlandés A. Ahlstrom, su carrera se centró en el ámbito académico.
Fue profesor asistente en la Escuela Sueca de Economía y Administración de Empresas y en 1979 comenzó su etapa estadounidense en la Universidad Northwestern, como profesor asistente de Economía empresarial.
De allí dio el salto a Yale, donde fue profesor de Economía entre 1983 y 1994, antes de recalar en el MIT, que lo describe como un “teórico de la microeconomía conocido por sus investigaciones sobre la teoría de los contratos y los incentivos”.
Es miembro de la Academia Americana de las Artes y las Ciencias y también de las principales academias científicas de Suecia y Finlandia.
Premio
El jurado ha confirmado la mayoría de estadounidenses premiados con el Nobel de economía, 56 –incluidos los binacionales– sobre un total de 78.
Este premio fue concedido el año pasado a Angus Deaton, también británico-estadounidense, por su análisis de los patrones del consumo, la pobreza y el bienestar, y su demostración de que la acumulación de riqueza no es necesariamente paralela a la mejora del bienestar.
El premio de economía, oficialmente “premio del Banco de Suecia de ciencias económicas en memoria de Alfred Nobel”, es el penúltimo de esta temporada Nobel, después de los de medicina, física y química anunciados en Estocolmo, y el Nobel de la paz anunciado el viernes pasado en Oslo.
El nombre del galardonado con el Nobel de literatura se anunciará el jueves.
Cada premio Nobel consiste en un diploma y en un medalla de oro, así como un cheque de ocho millones de coronas (€828 mil). Los galardones se entregarán el 10 de diciembre en Estocolmo.