Por ello, ambos sectores exponen sus expectativas y razones por las cuales defienden su postura.
A partir del 4 de febrero próximo los consumidores dejarían de tener los beneficios de pagos en cuotas, como una medida de presión de las empresas para reducir la regulación a las tarjetas.
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“Esperamos una ley sin contradicciones”
Carmen Sánchez , directora de la Asociación de Emisores de Medios de Pagos, opinó sobre las expectativas de ese sector respecto de la ley.
¿Cuál es el desacuerdo del sector respecto de la legislación?
Esperamos una ley sin contradicciones, que sea una regulación y no una intervención.
Hay que tomar en cuenta que un precio tope es algo difícil e inaceptable, pues los precios los debe determinar el mercado, y un precio tope elimina las posibilidades de hacer negocios.
¿Qué le cambiarían a la Ley?
La regulación en la tasa de interés y en los límites que se pueden otorgar a los clientes.
Existe el reglamento de créditos publicado por la Superintendencia de Bancos desde hace años, que nos instruye sobre cómo se deben analizar y autorizar los créditos.
Decir que a nadie se le pueden dar más de dos veces sus ingresos es una contradicción y un gran defecto de la ley.
¿La consideran poco técnica?
Sí, porque se mete a hablar y describir la forma de cálculo, la forma de los estados de cuenta, y convirtió en normativa cosas que han sido la práctica pero que no son la esencia, ni son indispensables, para que funcionen una tarjeta de crédito o un medio de pago.
La necesidad de eliminar el sistema de Visa Cuotas es consecuencia de esa Ley poco técnica.
Esperamos que la Corte de Constitucionalidad otorgue el amparo provisional y no entre en vigor la ley, porque estamos obligados a modificar sistemas y procesos.
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“Esperamos que entre en vigencia”
Omar López, presidente de la Asociación de Usuarios de Tarjetas de Crédito (Adutacred), defiende Ley y afirma que esta será de apoyo para el consumidor.
¿Qué esperan de la Ley vigente?
Esperamos que entre en vigencia y que se cumpla a partir de marzo.
Hicimos una propuesta para que las tasas de interés bajaran, porque los tarjetahabientes no estábamos de acuerdo con el actual sistema de cálculo de las mismas.
Esperábamos reacciones, como la suspensión del sistema de visa cuotas, lo que constituye una forma de presión seria.
El problema es que se aplica solo en los establecimientos en donde hay mayor consumo y no en todos.
¿Considera que es una Ley técnica?
No es necesario ser economista para saber que la tasa de interés es exorbitante, y si la ley es o nó técnica.
Lo importante es que la norma sí favorece al consumidor, porque baja la tasa de interés.
¿Se podría negociar el porcentaje de las tasas?
Esperaremos a que la Ley entre en vigencia para poder negociar otras opciones, pues hay algunos aspectos en los que se podría lograr consensos.
Esperamos que se mantenga lo relacionado a evitar los cobros por mora, el hostigamiento y la imposibilidad de capitalizar los intereses, como se hace actualmente.
Otro punto importante es que el interés sea accesible al pago y que no hayan cobros administrativos escondidos por parte de los emisores de las tarjetas.