El reenfoque al subsidio del Instituto Nacional de Electrificación (Inde) era necesario para evitarle problemas financieros a la institución, señalan Carlos Colom, presidente de la Asociación de Generadores de Energía Renovable (Ager) y el consultor Jorge García Chiu.
La Corporación San Diego (que incluye una generadora y comercializadora) presentó ayer sus modelos de venta de energía, que incluyen la instalación de la Zona Industrial San Diego en Escuintla.
El parque industrial, con una área de 200 mil m2 y que se busca inscribir como zona franca, tendría capacidad para albergar 25 Mipymes, dijo el directivo Fraterno Vila. También ofrece el modelo de tarifa preferencial, con todos los cargos incluidos y sin fluctuaciones.
Colom, sin embargo, agrega que el cobro por alumbrado público debe hacerse en forma porcentual y con ello, quien consume menos, pagaría menos. “Si no se hace ese cambio en el caso de la tarifa social, aunque se siga dando el subsidio, solo nos estamos engañando a nosotros mismos, ya que el impacto del alumbrado público es alto”, afirmó.
Colom, expresidente de la Comisión Nacional de Energía Eléctrica (CNEE), coincide con García Chiu en que se debe buscar la manera de que el costo de ese beneficio sea cubierto por el presupuesto del Estado. Esa misma postura ha reiterado en varias ocasiones la actual presidenta de la CNEE, Carmen Urízar. El Sindicato de Trabajadores del Inde (Stinde) también se une a esa postura.
García Chiu agrega que el reto consiste en cambiar la tecnología para lograr un ahorro de hasta 40% en el consumo de las lámparas públicas.
El Stinde propuso que el reenfoque sea para personas en pobreza y pobreza extrema y no solo por rango de consumo, ya que, en ocasiones, aunque este sea bajo se trata de negocios y oficinas o inmuebles con varios contadores.
El sindicato sugiere que se cree un canon para las hidroeléctricas privadas por el uso del agua, o que cobren al costo la energía para tarifa social.
Además, pide modificar espacios en el Consejo Directivo del Inde para que se eliminen los de las cámaras empresariales y Asociación Nacional de Municipalidades (Anam) y se agreguen la Universidad de San Carlos y el Stinde.