Sin embargo, el funcionario manifestó que, de acuerdo a las primeras estimaciones, el PIB crecerá entre 3 y 3.8% en 2018 por el aumento que se prevé, entre otros, en la economía de Estados Unidos, el principal socio comercial del país centroamericano.
Recinos anunció también que se espera que la Inversión Extranjera Directa (IED) que el año pasado alcanzó unos US$1 mil 298.8 millones, crezca un 5%.
Mientras que las exportaciones podrían aumentar hasta un 9%, el sector agrícola crecerá 3.2 % y las minas y canteras un 3.6 %.
El presidente en funciones de la Junta Monetaria añadió que para este año se pronostica una inflación de 4.5% -el año pasado cerró en 5.68%-.
En opinión de un diputado de la UNE, Carlos Barreda, las previsiones del crecimiento económico planteadas por Recinos son “demasiado débiles”.
Comentó que desde 2014 en Guatemala ha habido un deterioro de los indicadores económicos y sociales, los cuales se “profundizaron” con la caída, en 2015, del presidente Otto Pérez Molina, anotó.
“Vemos tasas de crecimiento demasiado débiles” quizá por la falta de confianza en el actual gobierno, subrayó el parlamentario.
El jefe del bloque de diputados de la UNE, Orlando Blanco, cuestionó que el año pasado solo se crearán 10 mil empleos formales, de acuerdo con las estadísticas proporcionadas por Recinos.
“No hemos logrado como país tener un modelo económico y social que nos permita tener un crecimiento más alto”, lamentó.