Esta es la primera vez, en los últimos cinco años, que el ente recaudador alcanza la meta, y será uno de los logros que destacará mañana el presidente Jimmy Morales en su informe de primer año de gestión frente al Ejecutivo, que presentará ante el Congreso.
En el 2016, Morales autorizó la exoneración de multas e intereses a contribuyentes por Q10 millones, lo que generó un rechazo de diferentes sectores por sus efectos en la moral tributaria.
Julio Héctor Estrada, ministro de Finanzas y presidente del Directorio de la SAT, declaró días atrás que mantenían una proyección optimista sobre la recaudación este año porque podría cerrarse con una brecha de hasta Q200 millones, la cual era positiva con respecto a otros ejercicios fiscales.
La recaudación estaba, en promedio, arriba en un 9% gracias a las medidas administrativas ejecutadas en el 2016, y 4% sin incluir esas acciones, dijo el funcionario.
Cobro extraordinario
Gracias a las intervenciones ordenadas por diferentes juzgados a solicitud de la Intendencia Jurídica de la SAT, otras medidas administrativas y el acercamiento voluntario de contribuyentes, el monto extraordinario recaudado superó los Q2 mil 800 millones.
Los ingresos por esta vía son considerados como un cobro extraordinario.
Sin embargo, en el servicio aduanero hubo una brecha que se dejó de percibir, asociada al tipo de cambio y a la disminución de los precios internacionales del petróleo, así como a la coyuntura económica internacional que mostró una desaceleración en el IVA importaciones, según las cifras dadas a conocer.
El 6 de mayo, la empresa Aceros de Guatemala fue la primera intervenida a solicitud de la SAT ante un juzgado de instancia penal.
La compañía acerera tenía un adeudo fiscal, que con el pago de intereses y multas, llegó a Q752 millones.
La AJE Maya fabricante de bebidas carbonatadas pago Q27 millones.
La cadena de farmacias Galeno pagó Q34 millones.
Agropecuaria Bellamar canceló Q375 millones.
Acerera Multiperfiles canceló Q62 millones al fisco.
Las distribuidoras de energía eléctrica Deorsa y Deocsa pagaron Q190 millones.
En total, más de 34 empresas fueron intervenidas por juzgados.
Regalías petroleras e hidrocarburos compartibles, así como el impuesto a la distribución de cemento, fueron otros tributos que cerraron en negativo, pero que se compensaron con el cobro extraordinario, se indicó.
Los impuestos que tuvieron una mejor recaudación fueron sobre la renta, al patrimonio y el IVA doméstico.
Este último se cobra mediante el consumo de bienes y servicios que realizan los contribuyentes.
Revisión
La SAT llevó a cabo una serie de revisiones de la meta original proyectada en el ejercicio 2016, que era por Q53 mil 850 millones.
A principios de año se consideró que el recaudo alcanzaría los Q50 mil millones, pero meses después se revisó al alza y se llegaría a los Q52 mil millones.
En un último reconocimiento y luego de concluir un proceso de reingeniería de personal y diferentes unidades, el ente recaudador determinó superar esa meta.
Para analistas tributarios, la SAT logró alcanzar la programación por esta vez por medio del cobro judicial, ya que este tipo de ingresos solo se da una vez y luego los ingresos, en los próximos años, volverán a caer a niveles que pueden complicar el financiamiento público.
Para este año, el Congreso aprobó ingresos tributarios por Q57 mil 994.8 millones, lo que significa Q4 mil 194 millones más —7%— de lo captado en el 2016.