“En los próximos días el equipo a bordo del Transocean Polar Pioneer trabajará para completar la porción superior del pozo para prepararse a perforar hasta la profundidad total una vez que el Fennica llegue al lugar”, añadió el mensaje, en referencia al rompehielos de 116 metros que debía reunirse con el resto de la flota de Shell en las islas Aleutianas, tras ser bloqueado por activistas de Greenpeace.
“Seguimos comprometidos a operar de forma segura y responsable y sumando a la larga historia de Shell explorando en aguas profundas de Alaska”, añadió la empresa anglo-holandesa.
El buque Fennica retomó su ruta el jueves tras ser bloqueado en el puerto de Portland, Oregon (noroeste de EEUU) por miembros de Greenpeace que se colgaron con cuerdas de un puente, sobre el agua, durante 40 horas. Otros activistas en kayaks también intentaron impedir la partida del barco desde el puerto.
Al señalar en la noche del jueves que el miembro número 13 de su organización había descendido finalmente, sin incidentes, Greenpeace indicó en Twitter que “todos los ojos miran ahora al presidente (Barack) Obama para salvar el Ártico”.
El mandatario estadounidense provocó la cólera de los ecologistas al autorizar en mayo a Shell a perforar en el Ártico. Denunciando los “enormes riesgos para las poblaciones del Ártico, la fauna y nuestro clima”, Greenpeace llama a los internautas a firmar una petición en línea pidiéndole a Obama que cambie de opinión.
Tras realizar las primeras perforaciones en 2012, Shell debió postergarlas en septiembre de ese año tras un problema con un buque.