En el plazo en mención del 2020 las indemnizaciones o pagos fueron por Q509 millones. Nolck hizo la observación que en ese entonces los seguros privados no cubrían casos de covid-19 (cuyo primer caso fue detectado en el país el 13 de marzo de ese año) porque en los primeros meses de pandemia el mandato presidencial era que todos los casos covid-19 se atendían en hospitales públicos designados para eso, y fue a mediados de año que se liberó para que se pudiera atender en hospitales privados.
De enero a abril del 2021 la cobertura total por los conceptos en mención fue de Q560 millones, de los cuales Q39 millones son por casos covid-19.
El resto del crecimiento reportado este año fue de Q12 millones por enfermedades diferentes al coronavirus, explicó el directivo. El incremento incluye casos respiratorios, pero no asociados al covid-19, sino otras afecciones respiratorias como neumonía, siniestros que ha subido mucho.
Indicó respecto a las pruebas se covid-19, que la mayoría de las aseguradoras sí las cubren y se incluyen como gastos médicos cuando es solicitada por un médico, pero cuando se realiza por decisión propia no las cubren.
“Lo que hemos visto es que sí hay incremento en la cantidad de hospitalizaciones por padecimientos respiratorios, que son generalmente neumonía y no todas las neumonías están relacionadas a covid-19”, agregó.
Expuso que además observaron que se ha incrementado el costo promedio de la hospitalización respecto de años anteriores, de entre 50% y 100%, y no tanto la frecuencia del uso del seguro para temas ambulatorios.
El ejecutivo mencionó que el aumento de costos también se deriva que ahora el personal de los hospitales usa equipo de protección y medidas de protocolo establecidas y no pueden trabajar simultáneamente con varios pacientes.
Alicia Chang, vicepresidenta de la Asociación de Enfermedades Infecciosas, dijo que probablemente el comportamiento de las enfermedades infecciosas en general vario por varias razones.
Los niños no se están enfermando con padecimientos respiratorias como normalmente sucede en el primer período del año, pero pudo ser que las personas debido a la pandemia no tuvieron la oportunidad de tener controles por los que a veces necesitan una o dos veces al año visitar a su especialista.
En otros casos por no querer salir de casa no fueron a sus controles por asma, enfisema pulmonar y otros, ya que la mayoría de personas optamos por tener consultas por la vía virtual, pero hay enfermedades que no solo necesitan control remoto ya que no es lo mismo tener seguimiento por su especialista, explicó Chang.
En el caso del asma por ejemplo, se le recalca mucho a los padres de llevarlos a seguimiento, y según el comportamiento del padecimiento así se va modificando la dosis, refirió.
Agregó que hay otras posibilidades. Una es que cuando les hicieron la prueba de covid-19 haya salido negativa pero ya que algunos hisopados salen como falsos negativos, y se les sigue dando tratamiento por otras enfermedades respiratorias.
Respecto a los costos refiere que la hospitalización en general solo el hecho de hacerse prueba de covid-19 ya aumenta el gasto del paciente, también están los insumos, y coincide por lo mencionado por Nolck respecto de los equipos de protección del personal. Además en la actualidad los hospitales privados, aunque tengan habitación con modalidad de habitación compartida, ninguno está dos personas en una misma habitación y prácticamente se vuelven como individuales lo cual también resultaría en un monto mayor para para el usuario que debe asumir ciertos costos.
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Además, ahora también se ha contratado más personal para algunas secciones. Un área de covid-19 tiene 10 camas, pero 5 enfermeros, los 5 llegan a trabajar esté o no esté llena la unidad porque se consumen más tiempo en atenderlos, comentó como ejemplo.
Para una persona que no es atendida a tiempo los tratamientos suelen más costosos o largos.
En general lo que sucedió con la pandemia es que el control de las enfermedades es pobre, y, por ejemplo, si había niños con condiciones crónicas, al reducirse el control se pudieron descompensar, además se está empezando a observar personas que tienen que volver a tomar tratamientos o servicios, comentó.
Para el abordaje de estos pacientes que dejaron su tratamiento o no tuvieron controles se está consumiendo más recursos porque a veces la respuesta al tratamiento ya no es la misma y se deben modificar las dosis, uno de estos casos es con los cánceres.
“El hecho que las personas retrasan la asistencia médica, los hizo consumir más servicios hospitalarios porque ya no solo era de usar sueros”, agregó al comentar casos estomacales que se pudieron haber presentado como el norovirus (virus contagioso que provoca vómitos y diarrea, entre otros síntomas).