Los términos y condiciones de Moviepass especifican que los usuarios de este servicio abonarán US$9.95 al mes y tendrán derecho a ver una película cada 24 horas en los cines de EEUU.
Según los datos de la propia compañía, el 91% de las salas de cine de EEUU forman parte de su plan.
No obstante, quedan fuera de este servicio de suscripción las películas en 3D, IMAX y otros formatos especiales de exhibición.
“MoviePass fue fundado para hacer más fácil a los apasionados espectadores y a los fans casuales ver películas de la manera en que estaban destinadas a ser vistas: en los cines”, señaló Mitch Lowe, consejero delegado de MoviePass y que fue uno de los cofundadores de la plataforma digital Netflix.
La rebaja en el precio de la suscripción de MoviePass coincidió hoy con el anuncio de que la compañía Helios and Matheson Analytics ha comprado una participación mayoritaria de este servicio.
La noticia ha causado revuelo tanto entre los fans como entre los diferentes agentes de la industria cinematográfica, algunos de los cuales han reaccionado con contrariedad a este servicio y a su reducido precio.
Para los espectadores, el precio de US$9.95 dólares al mes puede convertirse en una oferta muy tentadora si se tiene en cuenta que, en el segundo trimestre de 2017, el precio medio de una entrada en EE.UU. ascendió a us$8.95, de acuerdo con los datos de la Asociación Nacional de Propietarios de Cines.
Ese coste medio es, sin embargo, menor al que desembolsan los espectadores de grandes ciudades como Los Ángeles o Nueva York, donde un tiquete supera de manera habitual los US$10.
Sin embargo, AMC, la mayor cadena de cines de EEUU, respondió de manera contundente a MoviePass y emitió un comunicado de prensa bajo un elocuente título: “No son bienvenidos aquí”.
AMC mostró su “preocupación” por el anuncio hecho por un “pequeño y alternativo actor” de la industria de la “reventa de entradas para el cine” puesto que, en su opinión, el plan de MoviePass no beneficia “a los intereses de los espectadores, los teatros y los estudios”.
“El precio medio de una entrada en los cines AMC en el segundo trimestre fue de US$9.33 dólares”, apuntó el comunicado antes de asegurar que, si no hay compensaciones de otro tipo, “MoviePass perderá dinero de cada suscriptor que vea dos películas o más en un mismo mes”.
AMC dijo que no es contraria a los programas de suscripción para ir al cine, pero criticó el modelo de MoviePass por basarse en unos precios “insostenibles”.
Asimismo, AMC anunció que consultará con sus abogados para determinar si puede impedir que MoviePass oferte entradas de sus cines en su plan.
“Es el tipo grande teniendo miedo del tipo pequeño que ofrece un mejor valor a sus consumidores”, replicó Lowe, de MoviePass, en una entrevista concedida al medio especializado Variety.
El consejero delegado de MoviePass admitió que a corto plazo su compañía asumirá pérdidas, pero confió en poder demostrar que, en el horizonte lejano, su servicio contentará a todos: “Podemos trabajar junto a los estudios y los cines de una manera constructiva para que todos ganemos más dinero”.