Se trata de un edificio de tres plantas construido originalmente en el siglo XIX y adquirido por Inditex en 2015 y en el que se ha realizado una labor de recuperación de elementos históricos del edificio, como las columnas de hierro fundido de la fachada e interior y el muro de ladrillo original de la edificación.
En la entrada, una instalación floral a modo de puerta de entrada ayuda a abstraerse de la concurrida calle comercial. Del espacio llama la atención el juego con la luz natural.
Además, se han incorporado pantallas táctiles en los probadores que escanean la información de las prendas elegidas y dan ideas de combinación al comprador.
La tienda ha adoptado medidas de sostenibilidad, eficiencia energética y reciclaje con el propósito de ahorrar 30 % de electricidad y 50 % de consumo de agua respecto a una tienda convencional, aseguraron en un comunicado.
La empresa española de interiorismo Cándido Hermida se ha hecho cargo de la arquitectura y diseño interior del nuevo establecimiento.
El grupo Inditex se ha autoimpuesto el objetivo de que todas sus tiendas sean un cien por ciento ecoeficientes en 2020.
La apertura de la nueva tienda “es especialmente relevante por varios motivos: por la calidad y dimensión de su ubicación, por el componente medioambiental que impulsa los objetivos de nuestro proyecto de tienda ecoeficiente, por su diseño, y por su propuesta tecnológica” , apuntó en un comunicado el presidente de Inditex, Pablo Isla.
En total, son ya ocho establecimientos de Zara en Manhattan, donde la cadena abrió su primera tienda fuera de la Península Ibérica en 1989.