El actor, nacido en Bogotá y adoptado a los pocos meses por una familia italoamericana de Nueva York, aseguró que está trabajando con personas jóvenes para tratar problemas de adicción como el que él sufrió.
Según explicó, dejó las drogas en el 2006, cuando estaba ya en prisión.
La próxima semana, de hecho, Brancato tiene previsto hablar ante un grupo de universitarios tras una proyección de Una historia del Bronx, la película que le dio a conocer.
Brancato, de 38 años, fue condenado en el 2009 a 10 años de cárcel por intento de robo en un incidente en el que murió un policía en diciembre del 2005.
El intérprete había permanecido en prisión desde el suceso, por lo que ese tiempo se incluyó en el cómputo de su condena y le permitió abandonar la prisión a finales del pasado año, cuando quedó en libertad condicional.
En la noche del 10 de diciembre del 2005, Brancato acudió junto a Steven Armento a buscar drogas a un apartamento del barrio neoyorquino de El Bronx.
Según la documentación del caso, uno de los vecinos, un policía que estaba fuera de servicio, creyó que alguien trataba de robar en la vivienda y acudió a ver lo que ocurría.
Poco después comenzó un tiroteo en el que murió el policía Daniel Enchautegui, de 28 años, y tanto Brancato como Armento resultaron heridos.
Durante el juicio se demostró que Armento fue quien disparó al policía, por lo que fue condenado a cadena perpetua; mientras que el actor, quien hizo de hijo de Robert de Niro en Una historia del Bronx, iba desarmado.