A partir de enero, el 40 por ciento de las 17 mil escuelas urbanas recibirá una asignación de Q150 mensuales para alimentación. Las escuelas rurales recibirán Q1 diario por niño.
María del Carmen Aceña, ministra de Educación, expresó que la medida obedece a que los niños del área urbana desayunan antes de ir a la escuela y casi siempre llevan su refacción.
?Lo que queremos es que el programa de alimentación escolar sea un complemento para los niños. Por eso se pensó en dar prioridad a los estudiantes del área rural, que muchas veces llegan sin desayuno a la escuela?, indicó la funcionaria.
En el caso de las escuelas urbanas, indicó que las juntas escolares podrán usar la asignación para los días regulares que alcancen. ?Los recursos siempre son escasos, pero el éxito está en cómo uno los utilice?, puntualizó.
Participación comunitaria
En esta ocasión, el manejo de los recursos será diferente, pues en los programas participarán activamente los padres de familia y líderes comunitarios.
?Impulsaremos el programa Creciendo Bien, que pretende involucrar a los padres de familia en capacitación sobre cómo preparar y combinar adecuadamente los alimentos de sus hijos?, añadió Aceña.
Personal de organizaciones no gubernamentales será el encargado de capacitar, con apoyo de expertos en nutrición.
Lo que comen por región
Un estudio efectuado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), como parte de su programa de alimentación, señala que parte de la dieta diaria de los niños promedio del oriente del país consiste en tortillas, frijoles, crema, yuca, papa, atoles y en algunos casos fruta.
En municipios azotados por la desnutrición, la dieta de los pequeños consiste en maicillo, maíz, frijol y tortilla. En el altiplano, las tortillas son más comunes con chile pimiento, sal o tomate.
También se incluyen frijoles, algunos atoles y frutas, como uvas y manzanas.
En el área de Petén es más común que los niños coman tamalitos, tortillas, frijoles, queso, crema, huevos y frutas, como banano.
La investigación hace énfasis en que los menores de más escasos recursos que asisten a la escuela, en su mayoría no desayunan y basan su alimentación en tortillas con queso, frijoles o sal, que comparten con sus hermanos. El documento prioriza 116 municipios con desnutrición y desnutrición crónica.
Regresa a Educación
El programa nació en el gobierno de Álvaro Arzú y lo manejaba el Ministerio de Educación.
Desde entonces ha cambiado de manos varias veces.
En la administración Portillo estuvo a cargo del Estado Mayor de la Defensa, la Vicepresidencia de la República y finalmente del Ministerio de Agricultura.
La diversidad de proveedores hizo que la comida no llegara puntualmente a las escuelas y en algunos casos el dinero desapareció.
En 2005 se espera que la situación cambie y que el Ministerio de Educación administre los Q350 millones asignados al presupuesto de esa cartera.
Nutricionista: Lo más recomendable para un niño
Para mejor rendimiento y salud de los escolares, el desayuno es fundamental. Éste debería contener carbohidratos, proteínas y vitaminas, recomienda Andrea Sánchez, licenciada en Nutrición.
Indicó que el desayuno debería incluir un lácteo, leche o yogurt y cereal, no tan azucarado, y una fruta o jugo de naranja, porque contienen carbohidratos simples y vitaminas. Sánchez sugirió agregar tortillas o pan, para que el niño ingiera la cantidad de proteínas necesarias.
El Ministerio de Educación propone dar a los escolares un desayuno o refacción que consista en un chuchito y un vaso de atol con leche o panes y tortillas con frijoles, siempre con atol.
Sánchez señaló que la segunda es la mejor opción, aunque habría que agregarle una fruta.
?Los niños necesitan una alimentación balanceada que incluya vitaminas, carbohidratos, proteínas y minerales?, indicó.
La experta resaltó que respecto de los estudiantes de la provincia, que en muchos casos van a la escuela sin haber desayunado, lo más importante es comenzar por atender esta situación.
