Doña Aracely nos contó que decidió participar en 21 días de dar felicidad para poder apoyar una buena causa y se inclinó por la Residencia del Adulto Mayor San José de la Montaña.
Ella nos explica que su intención es bendecir con algo mínimo a los abuelitos que residen en dicho lugar, “compartiendo un poco de lo mucho que Dios nos da”.
Varios amigos y vecinos se sumaron para llevar papel, pañales y toallitas húmedas, entre otros artículos de limpieza y de primera necesidad.
Además, Sánchez agregó que les llevaron a los ancianitos una deliciosa comida. “Trajimos una refacción con mucho cariño, unos tamalitos de chipilín con salsa y cafecito, unas tostaditas”, agregó.
Por su parte Camila, de 12 daños, señaló que se siente muy feliz de poder poner un granito de arena para ayudar a estas personas.
“Mi nombre es Camila y vengo a acompañar a mi mamá para entregar este donativo. Me siento feliz, feliz con mi mamá de poder ayudarlos”, señaló Camila.
Agradecimiento y bendición
La Madre Victoria, quien administra este hogar de ancianos, se mostró agradecida y bendijo a doña Aracely, su hija y a todos los que hicieron posible este donativo.
La señora Lili Medina Gómez, quien es una de las ancianitas que vive en este hogar agradeció y aseguro que todas las cosas que les donaron serán de mucha utilidad.
“Les deseamos que la vida les sonría siempre por ser tan caritativas, muchas gracias”, comentó Medina Gómez.
La Madre Victoria envió un saludo de Navidad a los lectores de Prensa Libre: “Un abrazo para todos, que en la casa de cada uno de ustedes haya alguien que se deje sorprender con un abrazo, nuestros buenos deseos y nuestra felicidad”, dijo con entusiasmo.
Este es un gran granito de arena, que les permitirá a los ancianitos vivir con mayor comodidad estos años tan importantes de su vida.
Que el calor y la bondad que irradian las buenas acciones que compartimos en 21 días de dar felicidad, llenen su hogar de alegría y positivismo en estas fiestas de fin de año.