Hasta ayer se registraban 880 personas fallecidas por covid-19 a escala nacional y, según proyecciones del Ministerio de Salud, si el nivel de transmisión se mantiene como en la actualidad, para septiembre próximo habría siete mil fallecidos por esta enfermedad, lo que también supone un problema para sepultarlos.
El foco de la pandemia se encuentra en el departamento de Guatemala. En lo que va de la emergencia se han confirmado 14 mil 596 casos, el 68.5 por ciento de los contagios a escala nacional.
Hasta el 29 de junio último, el reporte de Salud registró a Guatemala como el municipio con más fallecidos del país, con 546 decesos —el 73.5 por ciento—, del total de 742 víctimas a nivel nacional.
Buscan espacios
La Municipalidad de Mixco empezó a analizar la habilitación de una fosa para enterrar a las víctimas mortales de covid-19, debido a que el cementerio está a punto de rebasar su capacidad.
Las autoridades municipales de Mixco también analizan habilitar un terreno para inhumar en fosas a los fallecidos de coronavirus. En la actualidad, según Mynor Espinoza, vocero de esa comuna, en los cementerios de ese municipio se inhumó a 30 personas.
“Estamos casi sin espacios, y las familias siguen trayendo a sus seres queridos fallecidos por coronavirus. La Municipalidad de Mixco gestiona un lugar para enterrar con mejores condiciones sanitarias”, expuso Espinoza.
Las proyecciones de Salud advierten brotes masivos de casos por covid-19 en los departamentos, y será un desafío.
En la misma situación está Villa Nueva, que también tiene carencias para efectuar las inhumaciones.
En los dos cementerios de Villa Nueva, por ejemplo, se ha enterrado a 78 víctimas de covid-19. El vocero de la comuna, Julio Vásquez, explicó que han tenido que evaluar qué familias no han pagado el uso de espacios, y “quienes están morosos son exhumados y retirados”, para tener “área disponible para los entierros” de las víctimas mortales de coronavirus.
El vocero de la comuna de Villa Nueva dijo: “Los cementerios del municipio ya no tienen espacios disponibles y estamos exhumando cadáveres cuyas familias están morosas en el pago de permanencia en los camposantos. El problema es que la pandemia sigue y, por lógica, habrá fallecidos; entonces, estamos analizando si habilitamos algún lugar para los muertos de coronavirus”.
En San Miguel Petapa, también la capacidad del cementerio se rebasó, pero según el alcalde Mynor Morales “no hay inconvenientes”, porque “contiguo al cementerio municipal hay un terreno grande que se empezó a usar para enterrar a los fallecidos de coronavirus”, que en la actualidad han sido 10 en ese municipio, según el registro que lleva la comuna.
Las autoridades de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam), hasta el momento, dicen que los gobiernos locales no reportan inconvenientes por inhumaciones.
El registro de Salud hasta el último mes detalló que Escuintla contabilizaba 44 decesos por covid-19, y San Marcos, 26. Sacatepéquez y Quetzaltenango, 22 fallecidos.